Trabajadores de la Fiscalía General del Estado (FGE) en Chilpancingo, han llevado a cabo una suspensión de labores y han ocupado sus oficinas para denunciar alegados casos de hostigamiento laboral. Cerca de 500 empleados pertenecientes a diversas agencias del Ministerio Público (MP) han decidido no trabajar como parte de un movimiento a nivel estatal. Desde las primeras horas de la mañana, se han congregado en las afueras de las instalaciones de la FGE.

La líder de la Sección 07 del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), Ana Jazmín Acosta González, informó que las conversaciones con las autoridades de la FGE se habían interrumpido el pasado jueves mientras se estaba negociando un pliego petitorio para este año.

Los manifestantes expresaron su descontento ante la ocupación de cargos directivos por parte de mandos del Ejército Mexicano, quienes estarían recibiendo salarios más altos que los trabajadores con varios años de servicio. Además, solicitaron que cesen los supuestos actos de hostigamiento laboral llevados a cabo por funcionarios de la FGE hacia el personal. Hicieron referencia al caso de José Luis Silva, titular de la Unidad de Atención Temprana, quien aparentemente habría amenazado con utilizar granadas y disparar si no se retiraban del lugar.

También señalaron que desde 2022 han estado solicitando mejoras en las recategorizaciones, un aumento en el bono de riesgo mensual que reciben y la implementación de seguros de vida para los empleados administrativos.