David Martínez Téllez
Ya estamos instalados en la era digital. Esto quiere decir: imagen. Palabra, ésta última que no necesariamente significa contenido o mensaje para reflexionar.
Luego de la derrota del partidazo PRI, llegó la imagen.
Fox ganó por su carisma. Efectivamente su mensaje vacío de contenido. Lo atractivo fue “vamos a sacar al PRI”. En los hechos hubo decepción (2000).
El PAN repite en el poder con Felipe Calderón por una necesidad social. Lo que se difundió en redes fue “peligro para México” y tuvo su éxito. Perdió por escaso margen AMLO (2006). Éste sigue sosteniendo que hubo fraude. No ha sido cierto, pero la mentira le ha ayudado a conservar el poder.
Llega a la silla presidencial otra imagen. El guapo de Peña Nieto y vuelve a perder AMLO.
En el siguiente proceso gana, ahora sí, el carismático AMLO. José Antonio Meade traía en su gen vitíligo, y esto le perjudicó.
Seguimos en política con el tema imagen.
Es altamente probable que la próxima contienda presidencial sea entre dos mujeres.
Por un lado, Claudia Sheinbaum; por el, otro Xóchitl Gálvez.
Y regresa el tema mediático. Imagen.
Claudia carece de este ADN. Lo trae Gálvez.
Reinsisto. Imagen no es sinónimo de eficacia.
Ahora veamos el tema contenido en el mensaje o en la historia política de estas dos mujeres.
Claudia, de acuerdo a su currículo es grado doctor. Sin embargo, no se refleja en sus exposiciones. Carece de carrera política, salvo que ha sido funcionaria y jefa de gobierno. En éste último tema con evidentes carencias.
Gálvez viene de cuna humilde y es símbolo del esfuerzo. Ha sido legisladora y dentro de sus propuestas e iniciativas se ha visto contenido.
Lo que le puede pesar a Xóchitl es que sea militante del PAN; sin embargo, en muchas de los principios del PAN, Gálvez no comulga. Es algo así como una rebelde del partido azul.
El carisma es un tema que se trae de origen. Su sola presencia impacta, ya sea en persona o en fotografías.
Claudia no lo tiene. Xóchitl sí.
En estos momentos de imagen a través de internet es importante la frase: para parecer hay que ser. Ya no se puede engañar a la ciudadanía.
Claudia no conecta con la gente. Lo que podría hacerlo es la orientación del presidente. En cambio Xóchitl trae de “nacencia” esta cualidad.
La oposición carecía de candidato. Las circunstancia han obligado a que aparezca Xóchitl Gálvez. En estos momentos Xóchitl se ha convertido en un fenómeno.
Como todo lo virtual, Gálvez puede caerse estrepitosamente en las preferencias sociales. Pero Claudia ya lleva meses y ya no levanta. Xóchitl sube vertiginosamente para asombro de millones.
Hay que esperar. La campaña ha iniciado.
No quiero dejar de lado mencionar que todos los partidos políticos han violado la ley. Situación que daña la democracia. Es un riesgo esta situación porque la ley sería sólo de adorno.