ANA LILIA TORRES

Turistas de bajos recursos que llegaron a pasar las fiestas de Navidad y Año Nuevo en Acapulco, instalaron casas de campaña para pernoctar en la playa Papagayo.

Desde la noche del domingo, familias enteras acampan en la franja de arena, para evitar el gasto de hoteles en esta temporada vacacional, una de las más importantes para la industria turística del puerto.

A pesar de que Acapulco es un destino con una oferta hotelera variada y tarifas para todos los bolsillos, los visitantes llegaron a ocupar las playas para dormir, habilitando lo que se conoce como el hotel Camarena.

Con el pretexto de no tener recursos para pagar un hotel, los vacacionistas comenzaron a colocar sus casas de campaña, donde también preparan sus alimentos, para ahorrar dinero y no gastar en restaurantes.

Aunque las autoridades municipales no han informado si estará permitido o prohibirán dormir en las playas, algunos policías turísticos exhortan a los visitantes a retirarse, sin embargo, les responden que no tienen dinero para pagar hotel.

En una de las casas de campaña, se encuentra una familia de nueve personas provenientes de la Ciudad de México, quienes decidieron venir a vacacionar, aunque no cuentan con recursos para un hotel.

Los prestadores de servicios se encuentran preocupados por la posibilidad de que el fin de semana lleguen más turistas a acampar a las playas, lo que se convierte en un problema por las condiciones de higiene y mala imagen que dan en las playas.

Hasta el momento el gobierno municipal de Acapulco no se ha pronunciado sobre la instalación de casas de campaña en esta temporada vacacional de fin de año.

El periodo vacacional es uno de los más esperados por el sector hotelero, que confía en que Acapulco  llegará al 98 por ciento de ocupación los días claves de la temporada decembrina.