• Encabezados por Nayeli Hernández, sindicalizados piden al Congreso del Estado que llame a cuentas a la titular de la Fiscalía General del Estado 

Jesús Saavedra

Afiliados al Sindicato de Trabajadores Burócratas y Servidores Públicos del Estado de Guerrero marcharon por calles de Chilpancingo y exigieron al Congreso del Estado que llame a cuentas a la titular de la Fiscalía General del Estado, Sandra Luz Valdovinos Salmerón, a quien acusaron de cometer abusos laborales en contra de los trabajadores de esa institución, porque desde que llegó al cargo ha ordenado el despido de más de 300 empleados sin motivo alguno.

Los inconformes marcharon desde el monumento a Las Banderas, por la avenida Lázaro Cárdenas, hacia el Congreso del Estado, en donde entregaron un oficio en el que piden la intervención del Poder Legislativo para frenar los abusos de la fiscal, porque fueron los diputados locales los que la designaron en el cargo.

La dirigente de ese Sindicato, Nayeli Hernández Neri explicó que desde la llegada de Valdovinos Salmerón ha ordenado el cese de trabajadores administrativos por negarse a realizarse exámenes de control y confianza, cuando consideran que no son trabajadores operativos.

Recordaron que hace un par de semanas realizaron una protesta en la FGE, “para exigir que cesen los despidos de trabajadores administrativos, que ya haya un alto a la actuación arbitraria en la FGE, no han querido dialogar”.

Denunció que cuando promueven sus movilizaciones, la FGE toma la decisión administrativa de dar el día a los trabajadores para evitar que más trabajadores se unan a las protestas.

Señaló que este fin de semana, también colocaron vallas metálicas en las inmediaciones de los accesos a la FGE, “nosotros no estamos realizando ninguna protesta violenta, pacíficamente queremos hacer valer nuestros derechos laborales”.

Exigió “la reinstalación de la compañera, Antonia Tolentino, trabaja en el área de aseo y le notificaron que debía hacer exámenes de control y confianza, pidió de manera amable que no le hicieran ese examen, pues solo se dedica a limpiar oficinas y por negarse le notificaron en la secretaría particular que estaba despedida, en los 10 años que he trabajado aquí no había pasado por esta penosa situación”.

Por ello acudieron de manera directa al Congreso del Estado, “pedimos que intervengan los legisladores y les dé una explicación de lo que está sucediendo en la FGE, que comparezca y rinda cuentas de esos procedimientos administrativos, como mi despido por haber formado este sindicato, a los que tacha de revoltosos y llevaba 17 años de servicio, pero fui despedida de manera injustificada”.

Aseveró que son más de 300 trabajadores los que han sido despedidos, “unos aceptaron sus finiquitos, otros demandaron como son varios casos y se van a perder los casos, el daño será al erario público y a las finanzas de la FGE”.

Las diputadas de Morena, Claudia Sierra Pérez y Nora Velázquez Martínez salieron a atender a los inconformes y quienes les recibieron el oficio que entregarían a la Mesa Directiva para su análisis, les explicaron.