•  El gobierno de Morena termina con una crisis de gobernabilidad expresada en las calles y en el humor social, acusó el exalcalde perredista

Gilberto Guzmán

El exalcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, hizo una comparación de los resultados de su administración con los que deja su sucesora, Adela Román Ocampo, a quien acusó de convertir en un caos al municipio.

A través de una publicación en redes sociales, el perredista dijo que cumplió su palabra de no haber sido un obstáculo para la actual administración, y no hacerle lo que a él le hicieron sus adversarios, que mantuvieron una campaña permanente de guerra sucia y linchamiento político para no dejarlo trabajar.

Señaló que la alcaldesa morenista tuvo a un gobierno federal de su mismo partido y a un gobierno estatal aliado, así como a los congresos federal y estatal con mayoría de Morena, pero no aprovechó esas circunstancias para generar mayor desarrollo para Acapulco.

Evodio Velázquez dijo que siempre respondió los cuestionamientos que le hicieron a su administración, pero Adela Román utilizó a la Contraloría para perseguirlo a él y a sus funcionarios, y hoy el propio contralor de Acapulco denunció la corrupción en la administración morenista.

Evodio Velázquez señaló que como alcalde entregó resultados que sentaron las bases para la construcción de un nuevo Acapulco, además de que su gobierno se caracterizó por la sensibilidad y el trato a la ciudadanía y a los movimientos sociales, lo que evitó tanta inconformidad en las calles.

“Recibimos el reto de dar paz social después de los acontecimientos de Ayotzinapa y la amenaza de hacer de Acapulco su protesta principal afectando al puerto turístico y su economía, mientras que este gobierno termina con una crisis de gobernabilidad expresada en las calles y en el humor social”, afirmó.

Destacó que se atendió a los grupos vulnerables y sectores de la sociedad implementando los programas de becas, de apoyo a discapacitados y el apoyo a microempresas, programas que la administración de Adela Román canceló y en algunos casos redujo a menos del 50%.

En obra pública enumeró mil 531 obras y 2 mil cuartos, pero en la actual administración ni la mitad de esas obras se hicieron y se dedicaron a abrir las calles que más pudieron, con la finalidad de comprobar el presupuesto.

Velázquez Aguirre aseguró que dejó obras emblemas de su gobierno como el puente elevado de la Vía Rápida, la remodelación del Centro Histórico, la Costera, la primera etapa de Farallón y el complemento del Acabús en la ampliación de Cuauhtémoc, obras realizadas y terminadas.

Además, “dejamos dos obras de gran alcance, el edificio del nuevo ayuntamiento quedó en un 80% pero por egoísmo no se quiso terminar, ya que dejamos recursos para seguir, con lo que se ahorrarían un millón de pesos mensuales que se paga de renta y centralizas los servicios para ayudar a la ciudadanía”.

Afirmó que hubo avances en seguridad mientras que con Adela Román tenían que andar tras de ella los mandos militares y el gobierno del estado “para que la señora pudiera coordinarse”.

“En mi gobierno instalamos el Grupo de Coordinación Acapulco, dimos origen a una nueva Policía Turística, que fue tomada como ejemplo en varios lugares turísticos, así como Capta que funcionaba verdaderamente como un área de atención al turista y al empresario, echamos a andar Zonatur que atendía los servicios públicos de la zona turística, todo ello lo echaron a la basura, cuando era un trabajo integral que se tenía que perfeccionar y seguir un plan de desarrollo”, lamentó Evodio Velázquez.

Agregó que con Adela Román se perdió la certificación ISO 9001-2015 lograda por el gobierno perredista, así como las calificaciones aprobatorias con Hacienda en el indicador del presupuesto basado en resultados, el indicador de competitividad en el IMCO y el primer lugar en transparencia con el ITAIGRO.

Velázquez también presumió el buen trato que tuvo hacia los trabajadores municipales, a quienes mejoró salarios, y hacia los sindicatos, a diferencia de Adela Román que les quitó bonos y otros derechos adquiridos.

“Con todo y los problemas de Capama ya conocidos nosotros decidimos invertir en la infraestructura y dimos a las familias de Acapulco el 70 por ciento de cobertura de agua, nunca faltó en la zona turística; hoy es lamentable que la zona turística está sin agua y las colonias al 20 por ciento”.

“Hoy Acapulco está en emergencia sanitaria y sus síndicos y regidores están destapando la cloaca, sus malos manejos de todo lo que ha sido esta administración”, acusó.