• * Feministas, personal médico de Petatlán, jubilados de la CFE y hasta familiares del exalcalde José Luis Abarca intentaron, sin éxito, que el presidente los atendiera

IGUALA.— Feministas, personal médico de Petatlán, jubilados de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y familiares del exalcalde José Luis Abarca Velázquez, reciben con protestas al presidente Andrés Manuel López Obrador durante su visita a Iguala, este miércoles en el marco de la celebración del Día de la Bandera y el Bicentenario de la Promulgación del Plan de Iguala. 

En esta ciudad, el presidente de México estuvo acompañado por su homólogo de Argentina, Alberto Fernández, como invitado de honor. 

Las feministas se manifestaron contra la candidatura de Félix Salgado Macedonio a la gubernatura de Guerrero por Morena, porque está acusado por el delito de violación en agravio de una excolaboradora suya. 

Las feministas se presentaron a las afueras del Museo a la Bandera donde AMLO tendría su segundo y último evento del día en Iguala, y un grupo de estas irrumpió al interior del inmueble donde mostraron sus lonas y pancartas. 

Por su parte, las enfermeras, doctores y otros trabajadores de salud del Hospital Básico Comunitario de Petatlán, ubicado en la región Costa Grande, exigieron que las nuevas instalaciones médicas destinadas al Insabi sean ocupadas por ellos pues las actuales presentan problemas estructurales que podrían causar su colapso.

Por su parte, los jubilados de la CFE piden la devolución de recursos del fondo mutualista que les fue descontado por gobiernos federales anteriores durante sus años de servicio.

Además, familiares del expresidente municipal, José Luis Abarca Velázquez, y su esposa María de los Ángeles Pineda Villa, esperaron a López Obrador para que a su paso mostraran una lona en la que pedían ser escuchados. 

En entrevista, indicaron que están solicitando una audiencia con el presidente de México a siete años de que sus familiares fueron apresados, aseguran, injustamente por el caso Ayotzinapa. 

Afirmaron que José Luis y María de los Ángeles han servido como chivos expiatorios ante la falta de resultados concretos en relación a la investigación sobre la desaparición de los 43 normalistas, ocurrida el 26 de septiembre del 2014.

Las manifestaciones ocurrieron en diferentes puntos del cerro Tehuehue y por donde pasó el convoy de camionetas en las que iban López Obrador, el presidente de Argentina y el gobernador del Estado, Héctor Astudillo Flores. En ninguna hizo alguna parada el mandatario nacional. (Con información de API)