• El barrio estaba olvidado, reconocen vecinos

Con una inversión de más de 500 mil pesos, el alcalde de Chilpancingo, Antonio Gaspar Beltrán, inauguró la construcción de drenaje sanitario de la calle Sor Juana Inés de la Cruz en el barrio de Tequicorral.

Juan Agüero Reyes, presidente del barrio, dijo que por muchos años, Tequicorral había estado olvidado y que pese a las molestias que cualquier obra causa, ellos estaban muy contento porque estos trabajos eran necesarios para dignificar la calidad de vida de los habitantes de esa zona.

El alcalde Antonio Gaspar aseguró que tiene un compromiso moral con ese barrio, y aunque no hay recurso suficiente para cumplir con toda la demanda ciudadana, lo que hace es de corazón y cumpliendo una responsabilidad que el pueblo le concedió.

Dijo entirse complacido con el gesto de respeto y agradecimiento que le manifestaron los vecinos, sosteniendo que aunque cumplir es el trabajo de un servidor público, ellos también necesitan de un apapacho: “no para inflarles su ego, sino para hacerle saber que el trabajo que se hace vale la pena”.

El evento de inauguración de la obra se realizó al aire libre y con un número mínimo de personas, todas utilizando cubrebocas y respetando la sana distancia ante la pandemia por COVID19.

* El barrio estaba olvidado, reconocen vecinos

Con una inversión de más de 500 mil pesos, el alcalde de Chilpancingo, Antonio Gaspar Beltrán, inauguró la construcción de drenaje sanitario de la calle Sor Juana Inés de la Cruz en el barrio de Tequicorral.

Juan Agüero Reyes, presidente del barrio, dijo que por muchos años, Tequicorral había estado olvidado y que pese a las molestias que cualquier obra causa, ellos estaban muy contento porque estos trabajos eran necesarios para dignificar la calidad de vida de los habitantes de esa zona.

El alcalde Antonio Gaspar aseguró que tiene un compromiso moral con ese barrio, y aunque no hay recurso suficiente para cumplir con toda la demanda ciudadana, lo que hace es de corazón y cumpliendo una responsabilidad que el pueblo le concedió.

Dijo entirse complacido con el gesto de respeto y agradecimiento que le manifestaron los vecinos, sosteniendo que aunque cumplir es el trabajo de un servidor público, ellos también necesitan de un apapacho: “no para inflarles su ego, sino para hacerle saber que el trabajo que se hace vale la pena”.

El evento de inauguración de la obra se realizó al aire libre y con un número mínimo de personas, todas utilizando cubrebocas y respetando la sana distancia ante la pandemia por COVID19.