* A cinco años del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, la exigencia de justicia fue unánime en el Poder Legislativo
Gilberto Guzmán
A unas horas de cumplirse cinco años del Caso Ayotzinapa, diputados del Congreso de Guerrero dedicaron un minuto de silencio para las seis víctimas mortales de la noche del 26 de septiembre de 2014 y un pase de lista para los 43 normalistas de Ayotzinapa que esa noche desaparecieron, sin que se haya esclarecido su paradero, al tiempo de enarbolar la demanda “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
En el último punto de la sesión de este miércoles, el coordinador parlamentario del PRD, Celestino Cesáreo Guzmán, registró una intervención para fijar postura sobre los cinco años de los ataques contra normalistas ocurridos el 26 de septiembre del 2014, que se cumplen este jueves.
Señaló que a cinco años, la indignación, el reclamo de justicia y la necesidad de conocer la verdad siguen creciendo.
Recordó que después de los hechos del 26 de septiembre de 2014 siguieron las dudas que dejó la investigación, que en diversos niveles se incurrió en responsabilidad por acción y por omisión, se registró una evidente manipulación política para responsabilizar al Partido de la Revolución Democrática y a su gobierno, entonces encabezado por el exgobernador Ángel Aguirre Rivero.
Apuntó que el gran pendiente es que no se han mejorado los cuerpos policiacos municipales, y que en las cárceles, Ministerios Públicos y Juzgados no hay garantía de acceso a la justicia.
“La tragedia de Iguala, no sólo mostró los grados de violencia con que actúa la delincuencia; también mostró la indolencia de las autoridades, así como el descarnado rostro del poder, cuyas motivaciones pueden corromper el funcionamiento de las instituciones, para convertir a México en un país donde impere la impunidad”, alertó Cesáreo Guzmán.
Subrayó que aunque hoy se investiga al investigador y se juzga al juzgador, la verdad no llega y las dudas siguen aumentando, igual que la necesidad de justicia y reconciliación social.
Mencionó que a pesar del cambio de gobierno federal, no se puede decir que esté por resolverse la desaparición de los 43, sobre todo por la actuación de los jueces al liberar a los implicados y al conocer la manipulación de la investigación por parte de la entonces Procuraduría General de la República.
“A ello se suma la dilación y la inacción de la Fiscalía General de la República para reactivar las pesquisas, que ya incomoda a los padres de los estudiantes, (porque) fue necesaria la orden del presidente Andrés Manuel López Obrador, para que el fiscal (Alejandro) Gertz Manero los recibiera después de diez meses de la llegada del nuevo gobierno”, acusó el perredista.
Agregó que el PRD da un voto de confianza al presidente para que en el reencauzamiento de la investigación vaya a fondo, castigue a los responsables materiales e intelectuales, y si se pervirtió la investigación, que haya sanciones.
“Confiamos, en que se alejará de la manipulación política, que no buscará salidas fáciles, ni habrá impunidad para nadie”, concluyó.
Ayotzinapa, el caso más dramático
Sobre el mismo tema, la diputada por Morena, Mariana García Guillén —quien era funcionaria en el gobierno de Aguirre Rivero— señaló que el Caso Ayotzinapa es la cronología de uno de los sucesos más dramáticos en la historia contemporánea.
Hizo un reconocimiento a los padres y madres de familia, así como a las múltiples voces que mantienen la visibilización de la lucha genuina y auténtica por la aparición de los 43.
“Con esa demanda se ha enarbolado como nunca antes una movilización que refleja a seres humanos rotos por dentro, quebrados pero no vencidos, rostros que no podemos ni debemos ignorar, que se aferran a una sola exigencia: vivos se los llevaron y vivos los queremos”.
Criticó que la investigación del Caso Ayotzinapa se haya viciado y haya tenido que iniciar de cero, pero que el gobierno federal tiene la oportunidad de convertirla en una política de estado que coloque en el centro a las víctimas y recupere la legalidad y la vigencia del estado de derecho.
Pendiente, comisión especial
Y el coordinador de los diputados priistas, Héctor Apreza Patrón, recordó que cuando ocurrieron estos hechos estaba en funciones la 60 Legislatura, de la cual formó parte, y desde la misma tribuna se sumaron a la demanda de justicia y al reclamo de “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
“Cinco años han pasado, visiones e interpretaciones, pero sigue estando pendiente la verdad. Sigue estando pendiente, en consecuencia, la justicia”, subrayó Apreza.
Agregó que sin conocer la verdad no se podrá hacer justicia, y recordó que hay una deuda pendiente de crear una comisión especial para dar seguimiento a las investigaciones de la desaparición de los 43, “es una deuda que tenemos pendiente porque no la hemos constituido, esa es una responsabilidad nuestra”.
Apreza pidió dedicar “un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de aquellos lamentables acontecimientos, y ojalá nunca, nunca, nunca vuelvan a suscitarse”.
Normal con estructura semiclandestina
La diputada Érika Valencia Cardona, también del Morena, dijo que la escuela normal de Ayotzinapa, con 85 años de historia, tiene “una estructura semiclandestina” que ha sufrido acosos de inteligencias civiles y militares.
“Es importante mencionar que el miedo que le han tenido estos gobiernos anteriores neoliberales, es debido a que quienes se preparan en estas normales rurales son hijos de campesinos y obreros, y muchos de ellos son indígenas con ganas de superarse y servir a su nación”, expuso.
Pidió al gobierno federal y a la Fiscalía General de la República a que se investiguen el Caso Ayotzinapa y se castigue a los verdaderos responsables, “porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”, demandó.
Vivos… se los llevaron
De Morena, Moisés Reyes Sandoval se sumó a la exigencia de que las autoridades federales investiguen y den resultados sobre los acontecimientos lamentables de Iguala.
Y respondió a Héctor Apreza que el minuto de silencio que propone debe ser para los estudiantes que murieron en los ataques del 26 de septiembre del 2014, y que para los 43 desaparecidos, “que hasta el día de hoy no sabemos en dónde se encuentran y esperamos que se encuentren con vida”, se hiciera un pase de lista en su honor.
Se procedió entonces a dedicar un minuto de silencio por las víctimas del 26 de septiembre del 2014 en Iguala.
Posteriormente, en el pase de lista para los 43 desaparecidos, se escucharon en la voz del diputado Moisés Reyes los nombres de:
Abel García Hernández, Abelardo Vázquez Penitén, Adán Abraján de la Cruz, Antonio Santana Maestro, Alexander Mora Venancio, Benjamín Ascencio Bautista, Bernardo Flores Alcaraz, Carlos Iván Ramírez Villarreal, Carlos Lorenzo Hernández Muñoz, César Manuel González Hernández, Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, Christian Tomás Colón Garnica, Cutberto Ortiz Ramos, Dorian González Parral, Emiliano Alen Gaspar de la Cruz, Everardo Rodríguez Bello, Felipe Arnulfo Rosas, Giovanni Galíndez Guerrero, Israel Caballero Sánchez, Israel Jacinto Lugardo, Jesús Jovany Rodríguez Tlatempa.
Y Jhosivani Guerrero de la Cruz, Jonás Trujillo González, Jorge Álvarez Nava, Jorge Aníbal Cruz Mendoza,Jorge Antonio Tizapa Legideño, Jorge Luis González Parral, José Ángel Campos Cantor, José Ángel Navarrete González, José Eduardo Bartolo Tlatempa, José Luis Luna Torres, Julio César López Patolzin, Leonel Castro Abarca, Luis Ángel Abarca Carrillo, Luis Ángel Francisco Arzola, Magdaleno Rubén Lauro Villegas, Marcial Pablo Baranda, Marco Antonio Gómez Molina, Martín Getsemany Sánchez García, Mauricio Ortega Valerio, Miguel Ángel Hernández Martínez, Miguel Ángel Mendoza Zacarías, y Saúl Bruno García, con un “presente” de los diputados después de cada evocación.
Pero el legislador trastabilló en la parte final y exclamó: “vivos los queremos, vivos… se los llevaron, vivos los queremos”.