* El dirigente de esa organización dijo que los problemas de seguridad no se resolverán “con armas y policías”, y señaló que cuando prohíbes algo, “lo haces más codiciado”
Alondra García
La Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) comenzó un censo de consumidores de drogas en los lugares donde tiene presencia, como parte de la estrategia de pacificación en las comunidades en las que tiene presencia.
En entrevista el fundador y vocero de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, detalló que el censo se está levantando en todos los pueblos en los que opera la organización.
Precisó que la organización tiene presencia en las regiones Costa Chica y Centro, algunos municipios de la Costa Grande, como Petatlán, Coahuayutla y La Unión, así como Zirándaro, en Tierra Caliente.
“Estamos en una etapa de reconstruir la sociedad, de fomentar la participación social en la toma de decisiones. No se puede resolver todo con armas y policías. Queremos atender la cuestión de las drogas como un problema de salud pública, no como persecución de delincuentes, porque cuando prohíbes algo lo haces más codiciado”, expuso.
Plácido Valerio subrayó que esta acción forma parte de los esfuerzos sociales por lograr la paz.
Aseveró que el despliegue de la Guardia Nacional es insuficiente para pacificar el país y por ello, la sociedad tiene que organizarse para erradicar la violencia desde el seno local y familiar.
El dirigente de la UPOEG señaló que la sociedad enfrenta una degradación en materia económica, política, social y familiar.
Ejemplo de ello, dijo, es que ahora se ve a más jóvenes participando en actividades delictivas y siendo asesinados en el contexto criminal que enfrenta el país.
“Los hijos ya no obedecen a los padres, se sienten más libres, más inteligentes que sus papás y por eso los muertos son ellos, por eso cada día hay más padres enterrando a sus hijos”, apuntó.
Por ello insistió en que la pacificación tiene que partir, forzosamente, desde un concepto social y no desde una estrategia armamentista.
“La pacificación se va a lograr hasta que cada uno haga lo que le corresponde (…). La educación es necesaria desde casa, no se trata solamente de aprender a leer y escribir. También se trata de recuperar los principios y valores que se nos han perdido, porque un delincuente pequeño que surge en la casa, un día se convierte en un gran delincuente”, expuso.
Plácido Valerio aclaró que la UPOEG está abierta al diálogo y la colaboración respetuosa con las autoridades, aunque no han sido convocados a ninguna mesa de trabajo.
Pero subrayó que la pacificación no vendrá de las autoridades, sino de la organización comunitaria.
“Respetamos los gobiernos, pero no tenemos la esperanza que resuelvan todo. Estamos asumiendo responsabilidad que nos toca. El cambio tiene que partir de cada uno de nosotros. Somos nosotros los que tenemos que cambiar, nadie va a resolver nuestros problemas si no lo hacemos nosotros mismos”, apuntó.
El activista indígena también convocó al gobierno federal a “construir un diálogo” con las organizaciones y la sociedad civil “para pacificar el país”.
Insistió en que la pacificación “debe construirse mediante una agenda social”.
También rechazó la posibilidad de que las policías ciudadanas depongan las armas, al menos hasta que no haya garantías de seguridad en las comunidades.