* El delegado del gobierno federal acusó a ediles de Tierra Caliente de ser chantajistas y les exigió que si tienen pruebas contra servidores de la nación, que presenten las pruebas

* Afirmó que los agricultores calentanos son los que recibieron “más fertilizante que en cualquier otro año”

ALONDRA GARCÍA

El delegado federal Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros acusó a los alcaldes de la región Tierra Caliente de chantajistas y “calumniar” el programa de fertilizante con tintes políticos, porque antes ellos lo utilizaban “con tintes electorales”.
El miércoles, ocho de los nueve alcaldes de la región Tierra Caliente ofrecieron una conferencia de prensa conjunta para exigir que el gobierno federal entregue el insumo agrícola a miles de campesinos que fueron excluidos del programa, a pesar de tener sus vales.
Los presidentes municipales de Pungarabato, Ajuchitlán del Progreso, Arcelia, Coyuca de Catalán, Cutzamala de Pinzón, San Miguel Totolapan, Tlapehuala y Tlalchapa coincidieron en que el programa fue un fracaso, denunciaron actos de corrupción y acusaron la entrega del abono con tintes políticos en beneficio de Morena.
Este jueves, Sandoval Ballesteros respondió a esas acusaciones, al señalar a los ediles de politizar el programa y les exigió que presenten pruebas de los supuestos actos de corrupción.
El delegado federal consideró “un exceso” que los alcaldes de Tierra Caliente hayan acusado a los servidores de la nación de cometer actos de corrupción en la entrega del fertilizante, como la venta del insumo.
“Me parece descabellado. Yo exijo que se presenten pruebas y se presenten denuncias, porque es muy fácil tirar una piedra y ocultarse. Eso es una calumnia”, sentenció.
Para Sandoval Ballesteros, las acusaciones vertidas por los alcaldes de Tierra Caliente surgen de la inconformidad que les generó que la operación del programa de fertilizante pasara a manos del gobierno federal, y por ende, ya no pueden utilizarlo para comprar votos en las elecciones.
“Entendemos que hay una afectación a los intereses de los presidentes municipales, porque antes los recursos bajaban directamente a los municipios y ellos los operaban”, dijo el funcionario federal, quien añadió que ahora “se les quita la posibilidad de hacer chantajes políticos a la gente y de utilizar (el fertilizante) con tintes electorales”.
Fustigó a los alcaldes calentanos por las acusaciones que hicieron contra los servidores de la nación y les exigió que actúen “con mucha responsabilidad, porque el estado y sobre todo la región Tierra Caliente, no están para estos chantajes”.
En la conferencia de prensa del miércoles, los alcaldes denunciaron que miles de campesinos fueron excluidos del programa de fertilizante en sus municipios.
El alcalde de Ajuchitlán, Víctor Hugo Vega Hernández, informó que hicieron falta cuatro mil productores en ese municipio; el de Coyuca de Catalán, Eusebio Echeverría Tabares, dijo que en su  municipio fueron 7 mil 500; el de San Miguel Totolapan, Juan Mendoza Acosta, alertó que faltaron 4 mil 800 campesinos por recibir el insumo.
También el alcalde de Cutzamala, Timoteo Arce Solís, informó que el 40 por ciento de los productores de su municipio no recibieron el fertilizante y el de Pungarabato, Reynel Rodríguez Muñoz, afirmó que hicieron falta el 65 por ciento de los productores.
El presidente municipal de Tlalchapa, Martín Mora Aguirre, acusó que el insumo no llegó a los verdaderos productores porque se repartió entre los familiares de los servidores de la nación; el de Arcelia, Adolfo Torales Catalán, aseveró que el programa fue un engaño y la alcaldesa de Tlapehuala, Anabel Balbuena Lara, aseveró que el padrón de beneficiarios “se hizo en el escritorio”.
Cuestionado al respecto, Sandoval Ballesteros aseguró que los municipios de la Tierra Caliente son lo que recibieron “más fertilizante que en cualquier otro año”.
“Se han inyectado más recursos entorno a este programa que en cualquiera de los años anteriores. Ellos pueden decir que no todos los productores recibieron el fertilizante, pero nosotros tenemos un listado que se cumplió en las fechas que se propuso”, afirmó.
Subrayó que las regiones Tierra Caliente y Norte “son los graneros del estado de Guerrero” y por ello se les apoyó más, y aunque reconoció que “puede que haya faltado” algún campesino en la entrega del fertilizante, insistió en que se distribuyó “mucho más” insumo que en años anteriores.
Aseguró que la entrega del abono cubrió la frontera de producción de maíz en la entidad, que es de 400 mil hectáreas cultivadas por pequeños campesinos, y aclaró que aún no concluye la distribución, ya que hay pendientes en la Montaña, esto a pesar de que Jorge Gage Francois, responsable del programa ya dijo que no habría ni un bulto más de abono para agricultores.
“Hace falta sobre todo en la región indígena y ahí no queremos tener ninguna falta. Ya hablamos con el secretario (de Agricultura y Desarrollo Rural) y estamos hablando con la Secretaría de Hacienda para que se dote nuevamente de fertilizante a la región Montaña. Vamos a solucionar este problema”, apuntó.
El funcionario federal también reprochó la cobertura mediática, las protestas y las críticas contra el programa nacional de fertilizante.
De entrada, aseveró que el programa ha sido tan transparente como “una caja de cristal”, a pesar de que nunca se publicaron las listas de beneficiarios, se tacharon los vales para entregar menos insumo a los campesinos y existen señalamientos de que el fertilizante es de procedencia coreana, diferente al licitado por la empresa Agrogen.
“Todo se sabe”, insistió Sandoval Ballesteros, quien reprochó que “en años anteriores no se transparentó” el programa y personas que no se dedicaban a sembrar, recibieron fertilizante.
Por ello, se quejó de que hasta este año se hagan críticas, señalamientos, protestas, bloqueos y seguimiento mediático al programa.
“En años anteriores nadie, ningún medio de comunicación daba ninguna portada para una protesta de campesinos que les faltaba fertilizante y sí había protestas, había cierre de carreteras y había retención de funcionarios, y nunca se le daba la atención que se le está dando ahora a este programa de fertilizante”, señaló.
Sandoval Ballesteros consideró que “es muy apresurado que se hable del fracaso del programa”, porque los resultados reales se conocerán hasta que se tenga registro de la producción de maíz.
Sandoval Ballesteros confió en que habrá “un campo mucho más productivo en el corto plazo”.
“Este es un programa piloto, yo creo que hemos tenemos tenido errores como lo ha admitido el presidente de la República y aquí en el estado lo hemos dicho una y otra vez. Podemos tener errores, lo que no podemos tener es mala fe, no podemos politizar esto (…). Hay una cuestión política, hay una presión, se está politizando el tema del fertilizante”, apuntó.