* Monseñor Leopoldo González lamentó la crueldad con la que mataron a 3 mujeres, en 4 días, y exigió a las autoridades que esos feminicidios no queden impunes
ANA LILIA TORRES
ACAPULCO.— El arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González, reprobó la crueldad con que en menos de una semana fueron asesinadas tres mujeres en diferentes zonas de Acapulco, y pidió a las autoridades correspondientes investiguen estos casos de feminicidios para que no queden en la impunidad.
El miércoles pasado, una mujer fue lapidada en la colonia Alborada; el viernes otra mujer fue asesinada a pedradas en la colonia Icacos y el sábado, otra más fue encontrada torturada y muerta, en el acceso al poblado de La Venta.
En conferencia dominical, el prelado católico señaló que causó una grave consternación el asesinato de las tres mujeres, sobre todo por la forma tan cruel en que lo hicieron, particularmente en el caso de la que fue lapidada.
El clérigo planteó que ante este repunte de los feminicidios, se deben fortalecer los esfuerzos por proteger a la mujer y prevenir la violencia de género, además de que las autoridades deben trabajar en estos casos e investigar a fondo para que no queden en la impunidad sus muertes.
Monseñor González González dijo que se necesita encontrar la verdad, para “saber quiénes asesinaron a estas mujeres y actuar en justicia para restablecer la paz que todos necesitamos”.
Consideró que se deben superar los sentimientos machistas y tratarse hombres y mujeres con el mismo respeto y dignidad, inculcando estos valores desde la familia y replicarlos en otros espacios como las escuelas.
En cuanto a los dos jóvenes que intentaron suicidarse, una mujer en el puente Bicentenario de la avenida Cuauhtémoc y otro en el puente peatonal del bulevar Lázaro Cárdenas, el jerarca católico dijo que cuando no encuentran sentido a la vida, es necesario voltear a ver el entorno más cercano que es el hogar y la escuela y otros espacios.
Lamentó que los adolescentes recurran al suicidio porque no se sienten queridos y por eso no aprecian su valor como personas.
Cuestionado sobre la declaración de la alcaldesa Adela Román Ocampo, en el sentido de que hay un panorama alentador en materia de seguridad, el arzobispo dijo que la seguridad empieza a nivel personal y que todos los ciudadanos deben colaborar para construir la paz.
En otro tema, sobre el hecho de que en algunos municipios todavía no llega el fertilizante, el clérigo señaló que en las comunidades le han expresado su preocupación por el retraso en la entrega del abono y el riesgo de que ya no sea útil para la siembra.