* El dirigente de los sindicalizados del Ayuntamiento de Chilpancingo dijo que sí hay dinero para que les otorguen un aumento salarial del 10%
Jesús Saavedra
Dirigentes y agremiados a la Sección 28 del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG) afirmaron que no tienen ninguna notificación oficial del Tribunal de Conciliación y Arbitraje (TCA) de que su movimiento laboral para demandar incremento salarial sea “ilegal”, y señalaron que están abiertos a una negociación con las autoridades del Ayuntamiento de Chilpancingo.
El dirigente de esa Sección, Natividad Adame Martínez, ofreció una conferencia de prensa acompañado de una treintena trabajadores en la que afirmó que el paro de labores y las manifestaciones que han realizado desde hace más de un mes, “se deben a la postura radical del presidente Antonio Gaspar de no entregar el incremento salarial que se entrega año con año”.
Aseguró que el alcalde perredista “no tiene sensibilidad para atender nuestra demanda, cuando el año pasado se entregó ese mismo porcentaje de incremento salarial; el dinero existe y está en las arcas para atender este tipo de demandas laborales”.
Manifestó que los sindicalizados del SUSPEG “no entendemos su postura si hace un año, el alcalde Marco Antonio Leyva Mena, que tenía muchos problemas entregó ese incremento salarial y no entendemos por qué Antonio Gaspar no lo hace”.
Consideró que el primer edil capitalino “le apuesta a que nos desesperemos, pero no va a suceder, hay más participación de los compañeros en la defensa de sus derechos e ingresos”.
Adame Martínez advirtió que están dispuestos a encontrar “una alternativa de solución a este movimiento laboral con las autoridades, a las que les decimos que el incremento que ofrecen del 3 por ciento no es suficiente para los incrementos que ha habido en la canasta básica; nosotros exigimos el 10 por ciento de incremento salarial base y 8 por ciento a prestaciones”.
El secretario de Asuntos Jurídicos de esa sección, Valentín de los Ángeles Moreno desmintió la afirmación del secretario del ayuntamiento de Chilpancingo, Antonio Orozco Guadarrama quien sostuvo que el TCA ha determinado que ese movimiento laboral es “ilegal”.
Dijo que lo que tienen conocimiento es que Orozco Guadarrama y el presidente del TCA, “sostuvieron una plática informal, pero no hay un escrito donde pidan a esa autoridad que sostenga la ilegalidad de este movimiento sindical”.
Y para sostener su dicho, mostró un documento en donde el TCA le entrega a esa sección “una notificación donde establecemos nuestras demandas de las condiciones generales de trabajo, si fuese ilegal este movimiento ya nos hubiesen notificado por escrito como debe ser y no por declaraciones públicas”.
Agregó que ellos van a continuar “en la lucha jurídica, el ayuntamiento debe manifestar disposición para sentarnos a negociar y resolver el conflicto; en cuanto resuelvan nuestras demandas regresamos a trabajar sin ningún problema”.
Natividad Adame, también se deslindó de las personas que colocaron los camiones recolectores de basura en la plancha de la Plaza Cívica y de los bloqueos que colapsaron este miércoles el centro de la ciudad, “pedimos que se aclare quiénes son los que llevaron esos vehículos y de los bloqueos”.
Y acusó directamente a los de la sección 14 de esas acciones, “hay intereses políticos en el otro movimiento donde está queriendo meter la cola el diablo, este sindicato tenemos 55 años existiendo y nos caracterizamos por la conciliación, la negociación y no la confrontación”.
Aseveró que los 776 trabajadores basificados y los 364 extraordinarios que pertenecen a la sección, “esperamos el llamado de las autoridades a sentarnos a negociar un acuerdo”.