* Con apoyo de otras organizaciones sociales, maestros disidentes rechazaron la reforma educativa propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador
* Automovilistas que se quedaron varados reclamaron a los manifestantes su actitud, mientras que funcionarios del gobierno estatal se limitaron a observar las acciones de los cetegistas
Alondra García
Con actitud retadora, luego de que la semana pasado policías desalojaron dos bloqueos en la Autopista del Sol, en Chilpancingo y Acapulco, integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo y de diferentes organizaciones sociales y sindicales, bloquearon durante tres horas esa vía de cuota.
Los contingentes exigieron el cumplimiento de distintas demandas, pero el contingente de la CETEG fue el más numeroso y el que tomó el liderazgo en la protesta.
El magisterio disidente manifestó su rechazo a la iniciativa de reforma educativa que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, envió al Congreso de la Unión, pues advirtieron que en el fondo es igual a la reforma del expresidente priísta Enrique Peña Nieto.
Se une bloque de sindicatos y organizaciones
Por la mañana, los cetegistas colocaron un campamento sobre la avenida Ruffo Figueroa, mientras que miembros del Sindicato Independiente de Trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo (Sitach) salieron en marcha desde la explanada del zócalo, avanzaron sobre las principales avenidas, con dirección al sur de la ciudad, hasta llegar al estacionamiento de Bodega Aurrerá.
Ahí ya los esperaban agremiados a diversos sindicatos y organizaciones sociales.
Minutos después de las 11 de la mañana salieron todos en marcha. Al frente se ubicó el grupo conocido como ‘Avanzada’ de la CETEG, unos 10 hombres encapuchados que, con palos, machetes y banderines rojos, se encargaron de garantizar la seguridad en el avance de la protesta.
La movilización avanzó sobre la avenida Lázaro Cárdenas, con dirección al norte, y al llegar a la altura de Ciudad Universitaria, doblaron hacia el Congreso del Estado.
En un primer momento los profesores de la CETEG empujaron el cerco tubular que rodea la sede del Poder Legislativo, y minutos después salió a dialogar con ellos el diputado local por Morena, Ricardo Castillo Peña, quien preside la Comisión de Educación.
A través del altoparlante, los profesores de la CETEG expusieron su inconformidad con la propuesta de reforma educativa que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso de la Unión.
Castillo Peña los escuchó y les ofreció una reunión con la dirigencia de la CETEG en el interior del Palacio Legislativo.
Una comisión representativa ingresó con el diputado y el diálogo duró cerca de media hora.
En ese lapso, los manifestantes mantuvieron cercado el Congreso de Guerrero y bloquearon las vialidades frente al edificio legislativo.
Cuando la comisión política salió, la marcha se reactivó. Los manifestantes avanzaron unos metros y se incorporaron al carril norte-sur del bulevar que conecta con la autopista.
La movilización avanzó sin mayor novedad, hasta que el contingente llegó a la altura de la tienda Walmart.
Ahí, el grupo de avanzada de la CETEG detectó a un presunto policía ministerial, quien se encontraba compartiendo información a través de un radio y un celular.
El hombre fue retenido por los profesores encapuchados, quienes le aseguraron los dos artefactos, le quitaron los zapatos y lo obligaron a caminar descalzo sobre el pavimento caliente.
Bloquean la Autopista del Sol
A la 1:45 de la tarde, la marcha llegó al punto conocido como El Parador del Marqués, en la Autopista del Sol.
Los marchistas tomaron el control de un camión con doble semi remolque y lo estacionaron a todo lo ancho del carril que conduce a Acapulco, para cortar por completo el paso de vehículos.
También ubicaron su camioneta de sonido sobre el carril que va en dirección a la Ciudad de México, de tal manera que impidieron la circulación.
Al lugar llegó el subsecretario de Asuntos Políticos del Gobierno del Estado, Martín Maldonado del Moral, quien negoció con la CETEG la liberación del policía ministerial retenido.
El hombre fue liberado y le devolvieron sus zapatos, pero no se retiró, sino que se quedó en el bloqueo para acompañar a Maldonado del Moral.
Uno a uno, los líderes de los diversos contingentes expusieron sus demandas en el altoparlante.
La CETEG manifestó su rechazo a la reforma educativa en los términos en que el presidente de la República la envió al Congreso de la Unión.
El Sindicato Independiente de Trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo (Sitach) demandó homologación del salario base, para que pase de mil 700 a tres mil pesos quincenales.
La líder del Sitach, Amada Ramos Zamora, confirmó que se rompió el diálogo con el alcalde Antonio Gaspar Beltrán, por lo que solicitaron la intervención del gobernador Héctor Astudillo Flores.
También participaron integrantes del Sindicato Único de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (Sutcobach) y de los dos sindicatos de trabajadores de la Universidad Autónoma de Guerrero: Stauagro y Sttaisuagro.
La marcha fue respaldada por estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, quienes se sumaron al rechazo de la reforma educativa.
Por su parte, los agremiados al Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana expresaron su oposición a la separación funcional del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), ya que pondría en riesgo la estabilidad laboral de los trabajadores.
En la protesta también participaron los sindicatos del DIF Guerrero y de la Universidad Pedagógica Nacional, quienes demandaron el cumplimiento a sus respectivos contratos colectivos de trabajo.
En tanto que jubilados y pensionados del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG) demandaron el pago de diversos bonos que se les adeudan desde hace años.
Diversas organizaciones sociales e indigenistas se unieron con diversas demandas en pro de sus comunidades y grupos étnicos.
A las 2:40 de la tarde, cuando ya había transcurrido una hora de bloqueo, varios automovilistas se acercaron a discutir con los líderes de la CETEG.
“¡Ya quítense!, vayan a protestarle al gobernador, a las oficinas del gobierno, a López Obrador, pero no se metan con el pueblo”, les reprochó un hombre de la Ciudad de México.
Una mujer bajó de su automóvil y, con altoparlante en mano, les dio 30 minutos para liberar la vialidad.
Después expuso ante los medios de comunicación: “En los autos hay mujeres embarazadas, hay niños. Si ponen el aire acondicionado no les va a durar la gasolina. También hay personas de la tercera edad, hay perros. Ya lo dijo Benito Juárez, el respeto al derecho ajeno es la paz”.
En ese lapso pasaron cinco ambulancias a través del bloqueo, unas con dirección a Chilpancingo y otras con dirección a Acapulco, las cuales tuvieron que abrirse paso entre los manifestantes y los automóviles varados.
A las 3:40 de la tarde, el dirigente de la CETEG, Arcángel Ramírez Perulero, anunció el fin del bloqueo, por lo que los manifestantes de los diversos sindicatos y organizaciones sociales se dispersaron.
Los agremiados a la CETEG marcharon sobre el carril central sur-norte de la Autopista del Sol, con dirección a sus oficinas, donde realizarían una asamblea estatal.