Rosario García
En Guerrero se calcula que hay por lo menos 260 mil personas que padecen diabetes, de los cuales solo 60 mil llevan un ligero control sobre su enfermedad, informó el secretario de Salud en el estado, Carlos de la Peña Pintos.
Explicó que esas cifras son un verdadero reto para las instituciones porque se requiere realizar tareas intensas de concientización sobre la prevención de esa enfermedad y el adecuado y organizado tratamiento que incluye medicamento, sana alimentación y ejercicio.
También es necesario, dijo, hacerle entender a la población que es corresponsable de su salud y modificar sus hábitos para que en el hogar haya una buena alimentación, y no haya más familias afectadas por la diabetes.
De la Peña explicó que ese padecimiento, como el resto de enfermedades crónico-degenerativas afecta seriamente a la sociedad, la economía familiar y el sistema nacional de salud, por lo que es importante insistir en la prevención y en un adecuado tratamiento.
La diabetes es la primera causa de mortalidad en el estado y de ahí se derivan infartos y problemas de insuficiencia renal, “que son enfermedades silenciosas, y que desafortunadamente son padecimientos que van mermando la salud, sin grandes síntomas, hasta que el deterioro ya es muy avanzado y las complicaciones ya son muy serias y requieren de gastos elevados”, aseguró.
Por ello, dijo, la insistencia en la medicina de primer nivel que permita tener una mejor calidad de salud, pero si es necesaria la participación directa de los pacientes, insistió.
De acuerdo a la estadística, De la Peña Pintos mencionó que se calcula que 8 por ciento de la población total puede padecer esta enfermedad, es decir que unos 260 mil guerrerenses son diabéticos, pero solo 60 mil están diagnosticados.
Lo más grave es que de esos 60 mil diagnosticados con diabetes el control de su enfermedad es muy bajo, porque se resisten a llevar la dieta adecuada, a tomar con la periodicidad que se requiere su medicamento, o en definitiva no hacen ejercicio, factores importantes para mantener bajo control ese padecimiento crónico-degenerativo.
Finalmente el titular de salud se congratuló porque el puerto de Acapulco será la sede del 31 Congreso Nacional de Diabetes del 14 al 16 de marzo, que reunirá a unos dos mil especialistas que se van a capacitar para poder orientar de mejor manera a los pacientes y a sus familiares en torno a cómo atenderse de este padecimiento.