* En Atoyac, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas presentó el Plan de Atención y Reparación a las Víctimas de la Violencia Política del Pasado

NOE IBÁÑEZ M.

ATOYAC.— La Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) ofreció disculpas a nombre del Estado, a las víctimas de la “Guerra Sucia” en Guerrero, que atentó contra ciudadanos y luchadores sociales en los años 70’s y presentó el Plan de Atención y Reparación a las Víctimas de la Violencia Política del Pasado.
Jaime Rochín del Rincón, comisionado ejecutivo de la CEAV, acompañado por el gobernador Héctor Astudillo Flores y la alcaldesa de Atoyac, Yanelly Hernández Martínez, frente a las víctimas de la “Guerra Sucia”, reconoció además que mediante su participación en el activismo social, impulsaron cambios necesarios por la justicia, el desarrollo, la igualdad, la inclusión y la democracia en México.
El comisionado ejecutivo señaló que este plan de atención y reparación pretende visibilizar a quienes desaparecieron; dar voz a quienes fueron silenciados y, además, recuperar a sus comunidades y reconstruir el tejido social.
“A las diversas instituciones aquí representadas, nos une un propósito: sanar una herida que continúa abierta, mediante la recuperación de la memoria, el acceso a la verdad y el respeto a la dignidad de las víctimas”, enfatizó.
Durante este evento realizado en Atoyac, una de las comunidades más afectadas en esa época, Rochín del Rincón señaló que de acuerdo a los más recientes análisis en torno al tema, ahora se sabe que “la represión fue una política de Estado, de represión e incluso de exterminio” en aquella entidad.
Así mismo, la represión en Guerrero obedeció a un patrón regular y preconcebido: “se trató de una política de Estado, una política de represión e incluso de exterminio”, dijo.
De acuerdo a la recomendación 26/2001, emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), se pidió a la CEAV crear un Plan Especial de Reparación del Daño individual y colectiva que hasta el momento incluye a 491 víctimas directas y 1070 indirectas de la “Guerra Sucia” de Acapulco, Atoyac, San Juan de las Flores y El Quemado.
Entre las medidas de satisfacción se encuentran: la creación de un mecanismo de investigación independiente, imparcial, y competente para el esclarecimiento de la verdad sobre las violaciones graves, generalizadas o sistemáticas a los derechos humanos ocurridos en la época; disculpa pública de las autoridades competentes.
Además, la creación de memoriales nacionales, regionales y/o de carácter físico, digital o virtual; instauración del Día Nacional para recordar a las “Víctimas de la Guerra Sucia”, entre otras.