* El responsable de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa dijo que parte del problema está en saber “a quién está apoyando la CRAC”, el referirse al enfrentamiento entre civiles armados que dejó 10 muertos ayer

ALONDRA GARCÍA

El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, afirmó “las cosas se están componiendo en Chilapa” y que hay avances en el pacto de paz entre grupos delictivos en esa municipio, a pesar del enfrentamiento ocurrido este domingo que dejó un saldo preliminar de 10 muertos y dos heridos.
En entrevista al término de la misa en la catedral, se le cuestionó sobre el enfrentamiento armado que se suscitó en el crucero de Paraíso Tepila y Rincón de Chautla, por tratarse de una zona perteneciente a la Diócesis que él encabeza.
El prelado dijo que contaba con “muy poquísima información”, pero adelantó que indagaría sobre los verdaderos intereses de los grupos en conflicto.
Rangel Mendoza comentó que estuvo en Chilapa a la una de la tarde de este domingo y que el párroco le informó que la ciudad “había estado tranquila”.
Tres horas y media después ocurrió el enfrentamiento entre presuntos pistoleros del cártel Los Ardillos e integrantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC).
El obispo consideró que “valdría la pena profundizar” en las causas del enfrentamiento y entender a qué se debe el conflicto entre comunidades.
De paso dijo que es necesario determinar “a quién está apoyando la CRAC”, porque “ahí está el asunto”.
Explicó que “muchas veces son pleitos de familia, pleitos de grupos (…). De la experiencia que tengo, ciertas familias, ciertos pobladores, apuestan por un grupo delincuencial y yo quisiera saber ellos para dónde batean, a quién han estado apoyando”.
Sobre el pacto de paz entre grupos criminales en el que lleva varios meses trabajando, dijo que hay avances importantes y que funcionarios de los tres niveles de gobierno están involucradas.
A pesar del enfrentamiento ocurrido este domingo, afirmó que “en Chilapa las cosas se van tranquilizando un poquito más, aunque no del todo”.
Subrayó que las personas asesinadas que han sido localizadas en el municipio fueron ultimadas “en otros lugares” y los criminales van a Chilapa “a tirar los cuerpos”.
“En lo personal creo que las cosas se están componiendo en Chilapa. Espero que las cosas sigan avanzando así”, confió el obispo Rangel Mendoza.