Carlos Navarrete
Académicos de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), exigieron al Congreso del Estado que antes de reformar la Ley Orgánica de la máxima casa de estudios —para eliminar el cobro de cuotas a estudiantes por exámenes de ingreso, inscripción, reinscripción y de otra índole—, se considere la opinión de la comunidad universitaria, porque esa propuesta no atiende de fondo las necesidades de la institución.
Ayer por la mañana, miembros de la Comisión Política de la Coordinadora Universitaria, grupo político de la UAGro, visitaron la sede del Legislativo para buscar un encuentro con el presidente de la Comisión de Educación, el diputado de Morena, Ricardo Castillo Peña, pero éste no se encontraba en su oficina, por lo que la reunión no fue posible.
En entrevista, Efrén Marmolejo Vega, profesor de la Unidad Académica de Matemáticas, recordó que esa organización entregó en días pasados un documento a Castillo Peña con el que le solicitaron que se considere a la comunidad universitaria en el análisis de la propuesta de reforma que presentó el 9 de octubre el diputado con licencia, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros.
“Obviamente queremos una respuesta a la solicitud que le hicimos con anterioridad acerca de la no pertinencia de abordar la reforma a la ley, en virtud de que debe consultarse a la comunidad universitaria”, señaló.
Marmolejo Vega explicó que dentro de la universidad se programa ya la celebración de un Congreso para discutir los cambios que necesita la UAGro, a fin de adaptarse a las medidas de austeridad que promueve el gobierno de la República.
Sin embargo, consideró que para garantizar la gratuidad de la educación en el nivel superior, como lo plantea la reforma a la Ley Orgánica, lo que se necesita es incluir a las universidades en el artículo 3 de la Constitución del país, que establece que la educación es obligatoria, laica y gratuita, por lo que desestimaron la propuesta de Pablo Sandoval.
“Para la universidad sí sería por el momento desestabilizarla económicamente, pero nosotros estamos haciendo ajustes, tenemos la misma meta de llegar a la gratuidad, el asunto es que esta modificación que se hace y que proponen en el Congreso es mínima, nosotros creemos que debemos reformar otras cosas en la universidad”, añadió.
Incluso, Marmolejo Vega dijo que “ya no se puede acusar a la Universidad del cobro de altas cuotas, toda vez que el Consejo Universitario aprobó la cancelación de todas las cuotas que fijaban los directores en las escuelas, al margen de lo que es el arancel oficial y que son cuotas mínimas, porque se refiere a gastos de servicio médico, de papelería, pero son muy menores, estos obviamente están todavía vigentes en la universidad”.
Finalmente, el académico comentó que entre las medidas que se plantean de manera interna en la UAGro, está el reacomodo del personal para que cada trabajador labore en áreas que correspondan a su perfil, así como la contratación de quienes tienen años dentro de la máxima casa de estudios pero aún no consiguen una plaza.
“(Los diputados) tienen el derecho de hacer esa reforma, pero deben esperar a que la universidad culmine este proceso que estamos haciendo. Es insuficiente lo que ellos pretenden reformar, son cosas de mayor profundidad lo que la universidad requiere”, aseguró.