* El gobernador dijo que en el Ayuntamiento de Chilpancingo la situación es particularmente complicada debido a las irregularidades financieras detectadas en la administración que concluyó
* Aseguró que la sociedad espera autoridades “comprometidas con el pueblo que no anden haciendo desfiguro y medio como administradores”
Rosario García
En las administraciones municipales que concluyeron y que se detecten daño al patrimonio público, se tendrá que proceder jurídicamente, advirtió el gobernador Héctor Astudillo Flores, quien reveló que la situación en el Ayuntamiento de Chilpancingo es particularmente complicada debido a las irregularidades financieras detectadas durante la gestión de Marco Antonio Leyva Mena.
El mandatario estatal fue entrevistado sobre la situación que dejan los gobiernos municipales de Chilpancingo y Acapulco, al concluir las administraciones de Leyva Mena y Evodio Velázquez Aguirre, respectivamente, ya que en ambos casos hubo manifestaciones ciudadanas de repudio porque dejaron serios problemas en lo que se refiere a la seguridad y los servicios como el abasto de agua y la recolección de basura, además que no pagaron la segunda quincena de septiembre a los trabajadores.
El mandatario estatal ofreció a las nuevas administraciones en ambos municipios trabajar de manera coordinada para bajar recursos de la federación y atender las demandas más apremiantes, pero también les pidió trabajar de manera urgente en dotar de los servicios básicos como agua y recolección de basura, y poner especial empeño en la seguridad para los habitantes.
Agregó que la sociedad espera autoridades comprometidas con el pueblo “que no anden haciendo desfiguro y medio como administradores”.
Al referirse al caso del gobierno municipal de Chilpancingo, criticó que Leyva Mena hubiera autorizado incremento salarial a los trabajadores, porque aunque “son buenos, correctos”, no debió hacerlo “en el último día de la administración”, ya que “fue un acto irresponsable”.
Astudillo Flores dijo que de acuerdo con informes preliminares de autoridades fiscalizadoras que ya conoce, en Chilpancingo hay una gran cantidad de obras públicas que van a quedar pendientes, y reveló que “el hoyo financiero en 2017 que es de más de 150 millones de pesos”.
Dijo que “son asuntos que conozco, que no me los platicaron. Un tiempo fui prudente, cuidadoso, pero me parece muy grave todo lo que sucedió” durante la administración de Leyva Mena.
Consideró que “las instancias como la Auditoría Superior de la Federación, la propia Auditoría General del Estado, deberán hacer en su momento lo que les corresponde, ellos tienen sus caminos, no es Héctor Astudillo quién se los va a decir, porque yo no estoy en una idea de instaurar una persecución”.
Sin embargo, señaló que “son temas que ahí están, que nadie los inventó, y que van a tener que ser atendidos en este caso por quienes se encargan de revisar que es lo que se hizo Y si hay daños al patrimonio municipal, pues por supuesto que se tendrá que proceder” contra los responsables, aseguró.
Por otra parte, sobre el caso específico de Acapulco, municipio que gobernará la morenista Adela Román Ocampo, Héctor Astudillo dijo que “no pedimos nada a cambio, solamente esperamos que exista entrega al trabajo, transparencia, honestidad y un enorme compromiso con el pueblo”.
También hizo referencia al trabajo realizado por la administración de Velázquez Aguirre, de la que dijo “se perdió mucho tiempo en conflictos, en una serie de problemas que lamentablemente dejan una administración mucho muy lastimada y si los servicios no eran buenos, ahora quedaron por los suelos”.