* Estudiantes, maestros y miembros de organizaciones sociales exigieron justicia al cumplirse cuatro años de los hechos de violencia ocurridos en Iguala

ROSARIO GARCÍA

Al cumplirse 4 años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en Iguala, este miércoles hubo protestas, marchas y mítines en Chilpancingo, Tixtla, Tlapa, Atoyac y Acapulco.
En Chilpancingo marcharon desde distintos puntos de la ciudad grupos de universitarios y normalistas, así como maestros del SUSPEG y CETEG, e integrantes de organizaciones sociales, quienes exigieron la presentación con vida de los estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos desde el 26 de septiembre del 2014 en Iguala.
La exigencia no ha cambiado, dijeron los manifestantes: “presentación con vida de los 43 estudiantes de Ayotzinapa” y justicia por esos hechos que le arrebataron la vida a 3 normalistas más: Julio César Ramírez Nava, Daniel Solís Gallardo y Julio César Mondragón Fontes, así como a tres ciudadanos que nada tenían que ver con los estudiantes.
Carlos Botello Barrera, miembro de la CETEG, se comprometió a que las movilizaciones del magisterio disidente en respaldo hacia los padres de familia no cesarán hasta que los normalistas aparezcan con vida.
Mujeres normalistas de planteles de otros estados aseguraron que “heridas como las provocadas por esos hechos violentos no las olvidarán nunca los mexicanos”.
En tanto, unas 30 personas aproximadamente tomaron el control de la caseta de cobro de Palo Blanco, en la Autopista del Sol, portaban banderas de la Normal de Ayotzinapa, y durante una hora permitieron el paso de vehículos a cambio de una cooperación voluntaria.
Lo mismo sucedió en la caseta de Paso Morelos, en la misma vía de cuota, donde proporcionaron volantes informativos a los automovilistas en los que daban a conocer lo sucedido esa noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre hace cuatro años.
Por su parte, estudiantes de Antropología de la Universidad Autónoma de Guerrero realizaron un bloqueo de manera intermitente sobre la carretera Chilpancingo-Tlapa, a la altura de Tixtla, para exigir justicia y presentación con vida de los normalistas.
Además, seis autobuses con estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y padres de los 43 se trasladaron a la Ciudad de México para participar en la marcha que realizaron ayer por la tarde, después de la reunión que tuvieron con el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
También en las instalaciones de la Normal de Arcelia se colocaron 43 butacas con los rostros impresos en hojas de papel de los desaparecidos en los respaldos, y en la paleta una rosa blanca y una veladora encendida, y se realizó el pase de lista de los jóvenes desaparecidos.
En Atoyac, en el obelisco a Lucio Cabañas, fue colocada una ofrenda por los normalistas asesinados en los hechos de Iguala.
En Acapulco también se realizó una concentración de maestros cetegistas que pidieron que se investigue la participación del Ejército en los hechos de Iguala.
En Tlapa, estudiantes de la Escuela Normal Regional de la Montaña (ENRM) ‘José Vasconcelos’, bloquearon calles del centro de esa ciudad y manifestaron su inconformidad con los nulos resultados de las investigaciones en torno al caso de los 43.
En todas las manifestaciones hubo exigencias al nuevo gobierno federal, que entrará en funciones en diciembre próximo, para que ya no utilice las instituciones del Estado para reprimir y combatir los movimientos democráticos.
Luego de esos hechos, hace ya 4 años, la Procuraduría General de la República tiene bajo proceso penal a 69 personas por el delito de secuestro y 50 por otros delitos, pero hasta el momento no hay nadie sentenciado.
Hasta el momento, mil 447 personas han declarado ante el Ministerio Público, se han hecho mil 945 intervenciones periciales, 22 cateos y 100 extracciones de información de aparatos telefónicos y electrónico; informó la dependencia federal.