* El mandatario estatal afirmó que el presidente electo Andrés Manuel López Obrador les dijo que “no va a ser una figura que se vaya a enfrentar con los gobernadores”, ni tampoco “será un intermediario” en la relación con jefe del Ejecutivo federal
Rosario García
El gobernador Héctor Astudillo Flores aseguró que la figura de coordinador estatal del gobierno federal “no será un intermediario entre el presidente de la República y los gobernadores”, de acuerdo con el reciente compromiso del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
Esa figura, a la que ya se le conoce como “súper delegado”, no se enfrentará ni competirá con los gobernadores, les dijo el presidente electo a los mandatarios estatales este lunes durante la segunda reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores, en la que el jefe del Ejecutivo de Guerreo fijó postura a nombre de sus homólogos priistas.
Astudillo Flores habló sobre el encuentro (de dos horas y media) entre López Obrador y los gobernadores de todo el país, el lunes pasado, en el que manifestaron sus dudas respecto a la conformación de las 32 coordinaciones estatales que remplazarán a todas las delegaciones federales.
Dijo que el presidente electo “nos dijo que los coordinadores estatales se van a encargar de darle seguimiento a los programas sociales, con actitud alejada de la prepotencia y coordinados con los gobernadores”.
Según el mandatario estatal, el presidente electo les precisó que ese nuevo funcionario “no va a ser una figura que se vaya a enfrentar con los gobernadores o a competir con sus funciones. No será un intermediario entre el presidente de la República y los gobernadores”.
Reiteró Astudillo Flores que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos “no reconoce intermediarios” entre los gobernadores y el Ejecutivo federal.
Por eso la inconformidad de los mandatarios estatales ante el anuncio de la asignación de “súper delegados”, o como le llamó el propio Héctor Astudillo “gobernador federal”.
Reconoció el jefe del Ejecutivo guerrerenses que tras la reunión con López Obrador, ésta figura “se ha ido aclarando y afinando”, luego de que el presidente electo respondió de manera puntual y con buen ánimo a cada una de las dudas de los gobernadores.
Por otro lado, y en torno a su relación con quien dirigirá los destinos del país, Astudillo Flores mencionó que “a mí me toca convivir con él, si Dios lo permite, poco más de tres años como gobernador, y yo lo que tengo que hacer es trabajar. La vida política, social y económica del estado sigue y se tiene que actuar con responsabilidad frente a los mandatos de los estados y sus ciudadanos”.
Dijo que “yo no ando pescando pleitos con nadie, trato de ser prudente, cuidadoso y las cosas poco a poco van avanzando”.
Considero que se requiere que los poderes Ejecutivo y Legislativo locales tengan una buena relación que permita avanzar y construir cosas positivas por el bien de Guerrero, por lo que los diputados de la próxima legislatura “tendrán de mi parte mi atención, respeto y mi colaboración, en la medida en que ellos lo consideren conveniente”, aseguró.