* Ricardo Barrientos, dirigente estatal del sol azteca, pidió cuidar que esa figura, que absorberá las funciones y operatividad de todas las dependencias federales, no lastime la autoridad de los gobernadores
Alondra García
El dirigente del Partido de la Revolución Democrática en Guerrero, Ricardo Ángel Barrientos Ríos, pidió al próximo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que con el nombramiento de un delegado estatal “no se vean lastimados los derechos constitucionales” del Ejecutivo, además que aceptó que puede convertirse en trampolín político.
En entrevista, el líder del sol azteca confió en que exista una “coordinación fraterna” entre el gobierno del estado y el próximo delegado estatal del gobierno federal, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros.
Barrientos Ríos advirtió la posibilidad de que la figura de los delegados estatales “lastime” la autoridad de los gobernadores, puesto que absorberán las funciones y operatividad de todas las dependencias federales en los estados.
Por ello, hizo un llamado al próximo gobierno federal que encabezará López Obrador para que su estructura “camine de manera cordial para lograr un mejor resultado para el estado”.
Señaló que el de Morena será “un gobierno y una propuesta distinta” y por ello reconoció que los cambios que se han anunciado parecen extraños.
Barrientos Ríos coincidió en la necesidad de “evitar el exceso de gastos en las delegaciones” federales, que es el objetivo que se busca con la creación de una sola coordinación, pero consideró que deberían crearse direcciones para las áreas específicas del gobierno federal que requieren de conocimientos técnicos.
“Todo lo que sea para bien, el PRD por supuesto que lo va a apoyar”, expresó el líder perredista, quien reconoció sin embargo que la figura del delegado estatal podría utilizarse para promover intereses electorales, sobre todo porque Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros ya contendió en el proceso electoral pasado por la gubernatura de Guerrero.
“Lamentablemente todo mundo hace lo mismo. Hoy no podemos criticar algo que hemos hecho por tanto tiempo todos los gobiernos, desde los municipales hasta los federales. Es un tema que no podemos evitar y que se vive día a día”, apuntó.
Barrientos Ríos también fijó postura respecto al próximo cambio de dirigencia estatal del sol azteca y recordó que la convocatoria para la renovación que se realizó a través del Consejo Nacional marca como fecha el próximo 28 de octubre.
Sin embargo, explicó que a finales de agosto sesionará nuevamente el Consejo Nacional para determinar cuál será la ruta a seguir para la restructuración de los comités, tanto nacional como estatales.
El primer paso como PRD, indicó, será la instalación de la línea política, la agenda legislativa y la línea general desde el partido.
Barrientos Ríos aseguró que por parte del Comité Ejecutivo Estatal se hará “el mayor esfuerzo para dar acompañamiento a los alcaldes”, para que la dirigencia se convierta en el “eje rector de la ruta crítica, desde la cámara local hasta las presidencias municipales”.
Detalló que el sol azteca consiguió 22 presidencias municipales en Guerrero, aunque hay otra que podría resolverse a favor del partido en los tribunales.
El resultado, dijo, “no es nada desagradable” en Guerrero, pero admitió que a nivel nacional el PRD no logró los resultados que esperaba.
Respecto al próximo presidente de la República, consideró que existirán muchas coincidencias con su gobierno, porque “nosotros como PRD nos consideramos hermanos de izquierda (con López Obrador). Nos sentiremos satisfechos como PRD de que muchas de las luchas que inició este partido hoy se empiecen a cristalizar. No sabemos si vamos a cerrar filas con él, nosotros de momento vamos a fortalecer nuestra ruta política como partido”, expuso.
Barrientos Ríos indicó que Morena y el PRD “tienen casi el 95 por ciento de coincidencia” política, con algunas pequeñas diferencias.