* Mayra Martínez, titular de esa dependencia, así lo consideró al participar en un foro estatal sobre diversidad sexual, ayer

Alondra García
 
En Guerrero hay “una contingencia” y “un estado de emergencia” a causa de la violencia contra la comunidad gay y las mujeres, aseguró Mayra Martínez Pineda, titular de la Secretaría de la Mujer.
La funcionaria estatal participó ayer en el Primer Foro Estatal de la Diversidad Sexual denominado ‘Cuando las palabras salen del clóset’, evento convocado por el ayuntamiento de Chilpancingo a través de la Dirección de Atención a la Diversidad Sexual que dirige el maestro Orlando Pastor Santos.
Durante su intervención, Martínez Salgado advirtió la prevalencia de violencia homofóbica y de género a causa de “antivalores” que permean en la sociedad.
“La discriminación a estas alturas y en este siglo ya no tiene razón de ser (…). Todavía me lastima la idea que puedan creer que una preferencia sexual sea una enfermedad mental. No podemos tratarnos así entre seres humanos”, expresó.
Advirtió que “la discriminación es una de las formas más arteras de vulneración a la dignidad humana”.
Esta discriminación, dijo, nace de la cultura “machista” y un “sistema patriarcal” que aún se impone en la entidad y que afecta por igual a las mujeres y a la comunidad gay.
Reconoció que la violencia contra la diversidad sexual es menos visible que la de género, ya que los casos de violencia y homicidios dolosos que ocurren en agravio de personas con orientación sexual diferente pasan “de manera silenciosa y a nadie le ha interesado levantar la voz para ir haciendo visible la estadística”.
“Son violentados sus derechos en el momento en que salen a las calles y son discriminados como personas, cuando piden un empleo y hay un sello para no contratarles porque tienen una preferencia sexual distinta, cuando salen a la calle y alguien los señala para burlarse”, expuso.
Por ello, aseveró que la entidad atraviesa por una “contingencia social” que debe atenderse a través de la defensa de los derechos humanos.
La funcionaria destacó la “valentía” de la comunidad LGBTTTI para “romper estereotipos” y al igual que el movimiento feminista “quitarse culturalmente sistemas patriarcales”.
También advirtió la necesidad de incluir a la diversidad sexual en las agendas políticas de los tres niveles de gobierno y abrir espacios en el ámbito político.