* Juan Pablo Leyva
* La resurrección de la “Coyota”
La paciencia es un árbol de raíz
amarga pero de frutos muy dulces.
Proverbio persa
Isaías Alanís
Hablar de Juan Pablo Leyva y Córdoba, es nombrar al amigo, al amante de los libros, escritor, orador, notario, promotor cultural, y tocar la parte más sensible de la historia contemporánea de Guerrero y de Chilpancingo donde nació en 1934.
Conocí a Juan Pablo, Hermilo Castorena, Arturo Nava Díaz y al “Coleguita” en 1996, los cuatro caballeros de la cultura, como los llamó un exgobernador.
Y de la mano de Dalia López Bustos, Ismael Catalán, Guillermo Augusto García, Juan Alarcón, Aníbal Vélez y Héctor Cárdenas, me introduje en los avatares del Grupo Proa y las torcidas ecuaciones del poder para consolidar un proyecto cultural en un Guerrero bronco y rural.
Juan Pablo transita por ocho décadas de lucha por la cultura, como lo demuestra su paso por instituciones: presidente del Consejo Consultivo del entonces Instituto Guerrerense de la Cultura; de la Sociedad de Geografía y Estadística, y un centenar de experiencias editoriales en un Guerrero aún seco en producción de libros, y promotor para la creación de la Secretaría de Cultura desde 1996 y de la Enciclopedia Guerrerense. Aún recuerdo a un sonriente Juan Pablo y a Hermilo Castorena haciendo las tormentosas antesalas con el proyecto de la Enciclopedia Guerrerense bajo el brazo en Casa Guerrero en espera de la “audiencia casi virreinal” con el gobernador; por cierto, la añeja noción de “audiencia” ya debería desaparecer y dar paso a un concepto democrático moderno.
Leyva y Córdoba se introduce en la vida política sin dejar su trabajo en la cultura. Ágora, viento del pueblo, la revista Luces. Publica la antología de Rubén Mora. Promueve la Nueva Antología de Poetas Guerrerenses. Con el cuento: Crónica de una despedida obtiene el primer lugar. Gestor de los Cuadernos de Cultura Guerrerense. Autor de la novela: Las vecindades de la muerte.
Impulsor de Guerrero Cultural Siglo XXI y asesor del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución.
Juan Pablo es un hombre comprometido con la búsqueda de equilibrios, la supremacía del intelecto por encima de la sinrazón, en un estado donde ésta reina y se pasea campante sin que nadie logre detenerla.
El pasado 5 de la tarde en el lobby del Auditorio Estatal Sentimientos de la Nación, se le rindió un merecido homenaje por su trayectoria y en memoria de los innumerables proyectos culturales de los que fue y es promotor y animador.
Qué bueno que este reconocimiento se le hace en vida, en momentos de crisis para Guerrero, golpeado por la naturaleza y el ancestral abandono de sus regiones desde hace doscientos años, y la ciudad donde nació Juan Pablo y muchos hombres ilustres, entre ellos el gobernador de la entidad y muchos amigos como Luis Zapata, atraviesa por una crisis no solo de violencia, también producto de la basura que se está convirtiendo en un grave problema para la salud de los capitalinos.
Estimado Juan Pablo, honor a quien honor merece. Las letras guerrerenses te deben mucho.
EL REGRESO DE LA MOMIA AZUL
En medio de un mundo en crisis con la negativa del gobierno español de admitir la independencia de Catalunya a macanazo limpio totalmente franquista, de una matanza supuestamente perpetrada por un musulmán de reciente generación en Las Vegas durante un concierto de música contri, “verdad” que poca gente cree. Y en Mexicalpan de las tunas, un país dolido, harto, brutalmente corrupto, al garete por terremotos y huracanes de todo tipo y escenas de terror por el desplome de un edificio en la Roma o de circo montado con Frida Sofía, y los legisladores priistas que de la noche a la mañana se venden como oposición al grito de “este dinosaurio si se ve”, sin importar que la idea de donar el dinero público de los partidos haya salido de Morena, para la reconstrucción de Juchitán, Jojutla y de todos los pueblos azotados por el sismo.
De pronto en medio de estas escenas de terror, se suma la participación de Diego Fernández de Cevallos, alias “La Coyota”, en el Frente Amplio Democrático por el PAN de Anaya, que es de pronóstico reservado.
Mayor burla no se le puede hacer a la historia del perredismo. Fernández de Cevallos, llamado eufemísticamente, el “jefe Diego”, sirvió a los intereses más oscuros de Carlos Salinas en la instrumentación de un bipartidismo por encima de la democracia y del PRD de entonces; por su bufete de abogado sexenal pasaron las carpetas más tenebrosas de las cañerías de la vida política de México. Punta Diamante, por ejemplo, y hasta antes de su misterioso secuestro, la defensa del exgobernador de Morelos, Sergio Estrada Cajigal señalado de trabajar por amor para un cartel.
Como es costumbre en Acción Nacional, en su momento cedieron con Zedillo y en las pasadas elecciones con EPN, vía Felipe Calderón y Josefina Vázquez Mota, que dobló la apuesta en el Edomex apoyando al primo del Mazo Maza.
Los panistas de la cúpula le han abierto cancha a sus aliados priistas a los que pretenden mandar al tercer sitio en las próximas votaciones con monedero y “moche”. Entre panistas y priistas hay una fusión de intereses a los que se suma el PRD. ¿Ya se les olvidó a los perredistas que durante el salinato fueron asesinados y desaparecidos cientos de militantes? O será que tienen memoria de chorlito porque el que está circunstancialmente como representante ante el Frente Amplio por Acción Nacional y Ricardo Anaya, es un enemigo potencial, un chicanero cinco estrellas del sistema. Y por el momento, jurado enemigo o amigo por interés de la familia Calderón-Zavala, dependiendo como se muevan los relojes previos al 2018.
DE REOJO
¿Qué pasaría si los mexicanos, emulando a los catalanes burlados por la constitución española, el próximo año ante el anuncio de una elecciones fraudulenta, salimos a la calle y se realiza un paro nacional en caso de que las votaciones sean tramposas?