*Monseñor Leopoldo González lamentó ayer la ola de asesinatos en Acapulco, entre ellos el del director de la Prepa 2 de la UAGro, José Villanueva

*Dijo que conoce los esfuerzos que hacen las autoridades para combatir a la delincuencia, pero advirtió que “la comunidad observa que están siendo rebasados”

 

Ana Lilia Torres

 

ACAPULCO.— Luego de lamentar el asesinato del director de la Preparatoria 2 de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), José Villanueva Arce, ocurrido el sábado pasado, el arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González, dijo que la comunidad está viendo que los esfuerzos de las autoridades “se están viendo rebasados” por la violencia.

El académico de la UAGro fue asesinado la mañana del sábado al quedar en medio de una balacera cuando conducía su auto, entre el mercado de la colonia La Laja y la avenida Ruiz Cortines, en la cual también murió un carnicero y otro hombre resultó herido.

En los últimos días, en este puerto se ha intensificado una ola de violencia que ha cobrado varias vidas, entre ellas la de un hombre asesinado en playa Tamarindos, un guardia de seguridad que fue ultimado en un asalto a Galerías Diana; una pareja que murió calcinada dentro de un vehículo y la de varias personas que fueron halladas desmembradas y sus restos esparcidos en distintas zonas de la ciudad acompañados de mensaje entre delincuentes.

Ante el aumento de los homicidios, el arzobispo González González pidió a las autoridades responsables de la seguridad y a la sociedad civil no cansarse y seguir trabajando en la prevención de este flagelo.

“Sé de los esfuerzos de las autoridades” para combatir a la delincuencia, dijo el jerarca católico, quien admitió sin embargo que “la comunidad mira que esos esfuerzos están siendo rebasados” por la violencia.

Dijo que por esa razón “hago un llamado a todos a que miremos al interior de nosotros y veamos que somos un bien, que nadie fue creado para dañar a nadie”.

También hizo un llamado a quienes están “perpetrando el mal” y cometen estos actos violentos, a que dejen de causar daño.

“Con relación al asesinato del director de la prepa 2 de la UAGro, de un comerciante y una persona que quedó herida en el ataque en el mercado de La Laja, queremos decir que es un acto no sólo violento sino inhumano”, dijo.

Monseñor González González expresó su pesar por estas pérdidas a las familias de las víctimas, por las que ha estado orando desde que tuvo noticia del hecho.

“Quiero decirles que me duele esto que pasó y que me sientan cercano; que aunque estas cosas sucedan, son cosas que no deberían suceder”, externó, y enseguida pidió a los ciudadanos contribuir a restablecer condiciones de paz no generando más violencia y tener un cambio de actitud.

Recordó que este 2 de octubre se conmemora el Día Internacional de la no Violencia, fecha que resulta propicia para enviar y promover un mensaje de no violencia, a través de una educación y la participación responsable de la sociedad civil en la vida política del país.

Por ello, destacó que en una exhortación pastoral del Episcopado Mexicano “expresamos nuestro empeño en apoyar la participación de la sociedad civil responsable para asumir corresponsablemente la tarea de alcanzar una cultura de la no violencia”.