Rosario Hernández
El arzobispo de la Diócesis Chilpancingo- Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, pidió que se abra una investigación contra el sacerdote de la comunidad de Tres Palos, municipio de Acapulco, acusado de intentar abusar de varios menores y advirtió que la iglesia católica tendrá cero tolerancia en este tipo de actos.
En entrevista, dijo que a pesar de que no puede intervenir en los asuntos de la Diócesis de Acapulco, ya que pertenece a otra jurisdicción, llamó a que se apliquen los protocolos de sanción eclesiástica y legal al sacerdote de la parroquia San José, exhibido en redes sociales, tal y como lo ha mandatado el Papa Francisco.
“Acapulco es otra Diócesis, es otra jurisdicción, ahora de que a veces los sacerdotes cometemos ilícitos, los cometemos, cometemos errores, y el Papa nos ha dicho clarito que tenemos que proceder inmediatamente, tanto en la disciplina dentro de la iglesia y si hay una culpabilidad civil se tiene que afrontar (…) Se tiene que abrir una investigación, el Papa (Francisco) ya nos dijo: Tolerancia cero, en este tipo de abusos”, afirmó.
Esto después de que el pasado 22 de junio, a través de redes sociales círculo un video donde pobladores exhiben y acusan al sacerdote de Tunzingo (Tres Palos) de presentarse en estado de ebriedad a la misa y manosear a dos niñas.
La grabación de dos minutos, 51 segundos, muestra a feligreses católicos reclamando al cura su actitud: “Usted está ebrio, retírese señor, si usted cree en Dios pídale perdón por todo lo que hizo ahorita, mañana no venga a oficiar la misa. -Al fondo se escucha una voz masculina, reclamando- ¿Entonces son mentirosas las niñas?, ya te lo dijeron en la cara”.
Mientras, una mujer señala en tono molesto: “Si a tus nietas se lo hubieran hecho ahí sí te iba a doler, si las niñas salieron llorando a decirme que las manoseó. Y mi sobrina no es mentirosa, ella salió a decirme que la manoseó”.
Dicho caso encendió los ánimos en las redes sociales, donde pedían una investigación y castigo para el cura. (ANG)