* Hay 20 casos de uniformados que fueron despedidos sin haber participado en el paro laboral y sus casos serán revisados, mientras que 30 mujeres quieren mantenerse en la corporación

 

Fernando Hernández / Redacción

 

Este jueves se instaló una mesa diálogo entre funcionarios del gobierno del estado y representantes de los 176 elementos despedidos de la Policía Estatal, para analizar caso por caso y determinar los montos de finiquito para cada uno, porque varios de ellos aceptarán su liquidación debido a los riesgos que representa ser policía.

David Clemente Herrera Mijangos, abogado de los policías despedidos, informó que el encuentro se desarrolló de manera cordial.

Entrevistado al término de la reunión en Palacio de Gobierno, comentó que el gobierno estatal propuso la liquidación conforme a la ley a todos los uniformados que suspendieron labores entre lunes y martes.

Según el abogado, el finiquito de cada elementos incluiría la suma de tres meses de salario, más 20 días de salario por cada año de servicio, el pago proporcional de aguinaldo y del fondo de ahorro.

Al término de la reunión, varios elementos dijeron que sí aceptarían la propuesta, porque de continuar como policías estatales enfrentarán un alto riesgo laboral, derivado de la crisis de violencia e inseguridad que se registra en el estado por la operación de grupos criminales.

Herrera Mijangos explicó que dentro de las mesas de diálogo entre los policías y la autoridad estatal también se tratará la posible reincorporación de por lo menos 20 elementos que recibieron notificación de proceso de despido, a pesar de que no participaron en el paro laboral.

“Se va a hacer una lista de aquellos que quieran ser finiquitados, se va a proporcionar la lista, van a hacer una cuantificación –del monto de la liquidación—, porque cada uno de los casos es distinto, cada uno tiene un salario, y una antigüedad distinta y si les conviene la cantidad que se les ofrece, aceptarán”, acotó.

Abundó en que pudiera haber otros casos en los que a los policías no les convenga el ofrecimiento de liquidación y estos pudieran pasar a una “tercera lista”, que serán los que pedirán ser reinstalados en sus puestos.

A partir de este día se realizarán tres reuniones más con autoridades estatales, para dar seguimiento a cada caso.

Los 176 elementos fueron despedidos de la Policía Estatal por participar en un paro laboral durante un día y medio en el que exigieron un incremento salarial del 50 por ciento, más viáticos, ajustes en sus jornadas laborales y mejores equipos y uniformes.

Entre los 176 elementos con proceso de cese se encuentran por lo menos 30 mujeres, la mayoría jefas de familia, quienes solicitaron su reinstalación.

La Comisión Estatal de los Derechos Humanos participó en la mediación de la mesa de trabajo.