* Fermín Alvarado dijo que Beatriz Mojica, secretario general del PRD nacional, debería responder por qué el alcalde Robell Urióstegui tuvo que abandonar Teloloapan después de recibir amenazas

 

Ana Lilia Torres

 

ACAPULCO.— El presidente del Comité Directivo Municipal del PRI, Fermín Alvarado Arroyo, acusó a los gobiernos del Partido de la Revolución Democrática de heredarle a la actual administración estatal el problema de la violencia, pues en 10 años que gobernaron el estado acumularon más de 16 mil víctimas en Guerrero.

En contraparte, dijo que a tan solo un año y medio de que Héctor Astudillo Flores asumió la gubernatura, Guerrero “pasó de ser un estado en llamas a tener un buen y mejor gobierno”, que afronta todos los días con determinación el problema de la violencia y habrá de entregar “mejores cuentas” en materia de seguridad.

En conferencia de prensa, el dirigente priísta señaló además que en el caso del alcalde de Telolapan, Robell Urióstegui Patiño, quien tuvo que salir del municipio por amenazas en su contra, “habría que preguntarle a los dirigentes perredistas, empezando por Beatriz Mojica”, porque ese municipio lleva 20 años siendo gobernado por el PRD.

El dirigente priísta acusó a los gobiernos del PRD de generar durante 10 años el desbordamiento de la violencia en Guerrero, porque fueron omisos y hasta cómplices, ya que nunca actuaron para resolverlo.

Señaló que en el 2005, el PRI entregó un estado con 589 homicidios dolosos, mientras que a partir de ahí y hasta el 2015, el PRD heredó a la actual administración una cifra más de 16 mil víctimas, equivalentes al 400 por ciento más que lo que recibió.

“Eso significa, primero, que la violencia no la generó este gobierno; la violencia la heredó el PRD en 10 años, en los que fue omiso y hasta cómplice”, remarcó Alvarado Arroyo.

Contrario a ese periodo gobernado por perredistas, el gobernador Héctor Astudillo Flores “asume como una prioridad coordinar personal y directamente la estrategia de combate al crimen y a la violencia para la recuperación de los territorios y espacios cedidos durante 10 años por los gobiernos del PRD”.

Sin embargo, Alvarado Arroyo señaló que de manera perversa la dirigencia del PRD y en particular Beatriz Mojica Morga no reconocen esas muertes que ocurrieron en administraciones en las que ella ocupó cargos de “altísimo nivel”.

Afirmó que hoy en Guerrero el problema de la violencia va a la baja y que el gobierno de Héctor Astudillo trabaja con una estrategia focalizada para el combate al crimen con objetivos específicos y en la reconstrucción del tejido social, por lo que confió que “él entregará mejores cuentas” al pueblo de Guerrero que el PRD.

“Como no lo hizo el PRD en los 10 años en que fueron gobierno, hoy, Héctor Astudillo enfrenta con determinación, plan y estrategia, al crimen y la violencia; recuperando, paso a paso, territorio y espacios  para la seguridad y la paz”, dijo Alvarado Arroyo.