* El vocero de los padres de los 43 criticó que mientras en Acapulco cientos de policías y militares vigilaron la visita del presidente Enrique Peña, en Chilapa continuó la violencia extrema

 

Alondra García

 

Además de asegurar que México “ya no es un país”, sino “una fosa clandestina”, el vocero de los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, en septiembre de 2014, Felipe de la Cruz Sandoval, criticó el amplio despliegue policiaco-militar que se implementó en Acapulco para resguardar al presidente Enrique Peña Nieto durante su visita, que incluyó la inauguración de la Convención Nacional Bancaria.

“Me sorprendió el operativo en el puerto, policías, marinos, militares de todo tipo, todo tapizado porque está el supuesto presidente de México, ese presidente que no ha tenido la capacidad de dar respuesta a los padres de familia por la desaparición forzada de 43 normalistas”, dijo el también maestro cetegista.

Durante su participación en la presentación del libro ‘Narco-periodismo’, del autor Javier Valdez Cárdenas, realizada la tarde de ayer en el auditorio de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), De la Cruz Sandoval criticó que “mientras en Acapulco la seguridad está al cien por ciento por la visita de Peña Nieto, en Chilapa aparecen seis bolsas con restos humanos”.

El activista aseguró que los mexicanos viven “sometidos a un sistema de represión donde a quien alza la voz lo matan, lo asesinan, lo encarcelan, lo desaparecen, lo destazan, lo desuellan”.

Lamentó que en el contexto de violencia que se vive en Guerrero, donde diariamente asesinan personas, las autoridades ya no se tomen el tiempo de investigar los crímenes.

Aseguró que, al parecer, la función de las policías y el Ejército se limitan en “reprimir y levantar cuerpos” de las víctimas de la violencia, y lo peor de todo “es que México sigue callado”.

Reconoció que existen “pequeñas chispas de inconformidad en diferentes estados de la República, pero la independencia aún no se enciende”.

El vocero de los padres de los 43 destacó que durante los últimos dos años y medio, el grupo se ha dado a la tarea de buscar justicia en un país que parece no conocerla.

“Este 26 de marzo vamos a cumplir 30 meses de una jornada larga, incansable, de tormento psicológico, emocional, físico, de todo tipo. Pero queremos decirles que seguimos tan firmes como el primer día porque estamos seguros de que lo vamos a lograr. Vamos a seguir en la exigencia, en el reclamo, porque hay muchas investigaciones que demuestran que el gobierno de Enrique Peña Nieto es un gobierno asesino, un gobierno corrupto que no da seguridad a los mexicanos y ha dejado de existir la democracia y el respeto a los derechos humanos”, sentenció.

De la Cruz Sandoval aseguró que México “ya no es un país, es una tumba, una fosa clandestina en la que nadie está exento” de convertirse en víctima del crimen o del gobierno, por lo que hizo un llamado a los mexicanos para que se sumen al movimiento que exige justicia para los 43 normalistas desaparecidos.

“Es por prevención, no queremos que vuelva a suceder jamás en nuestro país una pesadilla como esta, que ninguno de los que estemos aquí después tengamos que lamentarnos de no haber hecho algo antes. Estamos seguros que si dejamos este movimiento y permitimos la impunidad, lo más seguro es que se vuelva a repetir como muchos crímenes de Estado”, expuso.