* El gobernador Héctor Astudillo firmó ayer un convenio con los alcaldes Marco Leyva y Pablo Higuera que resuelve el destino final de las 400 toneladas de basura que se producen en la capital
Fernando Hernández / Redacción
El problema derivado del cierre del basurero de Chilpancingo y las protestas que se han generado por la improvisación de un tiradero de desechos temporal en las inmediaciones de la pista aérea de la capital, quedará resuelto a partir de la próxima semana, aseguró ayer el gobernador Héctor Astudillo Flores.
Entrevistado en Casa Guerrero, el mandatario estatal dijo que “ya intervine, en la próxima semana este asunto ya se mueve, acabamos de firmar el acuerdo hace un momento” con autoridades del municipio de Eduardo Neri, donde se prepararán celdas para depositar en ese lugar la basura que se genera en Chilpancingo y en Zumpango.
Astudillo Flores aseguró que el convenio cuenta con la autorización del Cabildo de Eduardo Neri, “se dialogó con una serie de organizaciones, el gobernador encabezó todo esto, de tal manera que es un asunto que ya está caminando” y en “muy pocos días” comenzará a operar ese basurero, confió.
Por la tarde, la Dirección de Comunicación Social confirmó la firma del convenio en la que participó el gobernador, quien “instruyó a la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Karen Castrejón Trujillo, dar seguimiento a los procesos emergentes y el debido cuidado al medio ambiente de dicho espacio, mismo que recibirá más de 400 toneladas de basura diariamente de ambos municipios”.
Precisó que “el relleno sanitario que beneficiará a miles de habitantes de ambos municipios colindantes, tuvo del gobierno del estado una participación económica de 6 millones de pesos, mientras que el Ayuntamiento de Chilpancingo aportó otros 6 millones más para el saneamiento y clausura de este depósito de desechos”.
Por su parte, el gobierno municipal de Chilpancingo que encabeza el alcalde Marco Antonio Leyva Mena informó que “gracias a la colaboración y apoyo del gobernador Héctor Astudillo, los alcaldes de Eduardo Neri y Chilpancingo firmaron el convenio para el saneamiento y rehabilitación del relleno sanitario ubicado en Zumpango, en el cual se depositarán los residuos sólidos urbanos de ambos municipios y contará con una inversión de 12 millones de pesos”.
Aseguró que durante la firma de este convenio, los presidentes municipales Pablo Higuera Fuentes y Marco Antonio Leyva Mena, pusieron de manifiesto su voluntad política para dar solución al tema del destino final de la basura, en el que tienen que ver todos los ciudadanos de Chilpancingo y Zumpango.
El convenio de colaboración se da sobre la base de buscar el bien común para el cuidado del medio ambiente y la salud de las personas, el cual consiste en que Eduardo Neri necesita sanear su tiradero de basura que tiene al aire libre, y para ello, requiere de basura, la cual será proporcionada por la ciudad capital, y así cumplir con la disposición del juez y autoridades encargadas del cuidado al medio ambiente en ambos municipios.
Según el gobierno municipal de Chilpancingo, “a partir del próximo lunes”, Servicios Públicos del municipio “podrá estar depositando sus desechos sólidos por un lapso de ocho meses en la celda del tiradero de basura de Zumpango”, pero mientras eso ocurre, “la basura se estará recibiendo en un predio ubicado sobre la avenida Llano Grande, y posteriormente será removida al vecino municipio”.
Para el saneamiento de la celda, el municipio de Eduardo Neri, participará con el terreno y el gobierno del estado junto con el municipio de Chilpancingo, aportará el presupuesto requerido.