* Ante el complicado panorama económico para este año, después del gasolinazo, no se le pueden pedir sacrificios a la gente si el gobierno no pone un ejemplo claro de austeridad, consideró el gobernador

 

* Al presentar los 20 Compromisos para la Estabilidad y el Desarrollo del Estado de Guerrero, aseguró que “no hay espacio en esta administración para la corrupción, el abuso, la prepotencia y la deshonestidad”

 

Gilberto Guzmán

 

El gobernador Héctor Astudillo Flores explicó que el plan de austeridad de su administración, como medida de contención a una crisis mayor por el aumento en los precios de las gasolinas, no sólo obliga a la reducción salarial de los funcionarios públicos, sino a recortar rubros del gasto corriente, revisar en qué se gasta el dinero de los ciudadanos, reorientar los ahorros a programas sociales que mejoren las condiciones de vida de los guerrerenses, y sobre todo cuidar el patrimonio público, manejar con pulcritud cada peso que gaste el gobierno estatal.

“No hay espacio en esta administración para la corrupción, el abuso, la prepotencia y la deshonestidad”, aseguró en su mensaje durante el anuncio de los 20 Compromisos para la Estabilidad y el Desarrollo del Estado de Guerrero, realizado este domingo en Casa Guerrero.

Astudillo Flores señaló que México está viviendo momentos difíciles, con enormes desafíos a nivel internacional que impactan directamente a todos los mexicanos.

“Son momentos que exigen corresponsabilidad de todas y de todos, y el gobierno del estado, el Ejecutivo del estado, es el que debe dar el paso adelante”.

Recordó, sin embargo, que hace poco más de un año recibió una administración con un enorme gasto operativo, y las participaciones y los ingresos propios han reducido el margen de maniobra que tiene el Poder Ejecutivo.

“El enorme desequilibrio estructural de las finanzas públicas heredado, por alrededor de 23 mil millones de pesos, incide reiteradamente en la merma de las participaciones estatales, y con ello de manera inevitable se dispone de menores recursos líquidos a lo largo del ejercicio fiscal”, explicó ante representantes populares, presidentes municipales, diputados federales y locales, así como dirigentes de sectores empresariales, industriales y productivos que acudieron al evento.

El mandatario estatal señaló que el año pasado, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) fincó un crédito fiscal por el orden de 4 mil millones de pesos, causado por el no pago de impuestos federales en administraciones pasadas, “y obligadamente se tiene que cubrir a lo largo del presente ejercicio. El SAT no perdona ni exime de deudas, tendremos más mermas a los recursos en las finanzas estatales”, alertó.

Además, dijo que la Auditoría Superior de la Federación mantiene observaciones a ejercicios anteriores por un monto aproximado a los 7 mil millones de pesos, lo que representará más presiones de pago para el Ejecutivo.

“La proyección financiera es complicada para el cierre del presente año, y exige cancelar una serie de compromisos presupuestales que no son prioritarios”.

Por esa razón, agregó, es que su administración no suspenderá el cobro de la tenencia vehicular, porque “es el más importante de los ingresos propios del gobierno del estado”, ya que por los 300 millones de pesos que ingresan por concepto de tenencia vehicular, “se reciben alrededor de 600 millones de pesos más de participaciones federales”.

Explicó que en la medida que un estado o un municipio recauda, la federación otorga mayores participaciones federales, y “si un estado o un municipio recauda menos, las participaciones federales disminuyen”.

El gobernador subrayó que no se le pueden pedir sacrificios a la gente, si el gobierno no pone un ejemplo claro de austeridad.

“Austeridad no significa que el gobierno no va a emprender obras o va a dejar de hacer política social; austeridad significa revisar en qué estamos gastando el dinero de los ciudadanos, preguntarnos si ese gasto ayuda a mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos y ciudadanas guerrerenses”, destacó Astudillo Flores.

“Por eso es muy importante que con acciones como las anunciadas, podamos reorientar recursos a programas que sí traigan beneficio, especialmente a todos aquellos grupos de guerrerenses, hombres y mujeres, que han sido afectados por los recientes acontecimientos por el alza de los combustibles”.

Dijo que no se puede permitir que las familias guerrerenses, especialmente las que menos tienen, vean afectado su patrimonio.

Destacó que el Poder Ejecutivo está realizando un esfuerzo sin precedentes para ajustar sus gastos. “No sólo estamos reduciendo 30 por ciento el salario del gobernador, el 20 por ciento de mandos superiores y 10 por ciento los de mandos medios. También, estamos haciendo recortes importantes en gastos como choferes, escoltas, rentas de edificios, compras de gobierno”.

Además, precisó, se reduce el 30 por ciento el gasto en Comunicación Social y se avanza con la reducción del gasto en gasolina y la eliminación total del pago de celular y alimentación a los funcionarios de este gobierno, “entre muchas otras acciones que ya se enumeraron”.

El mandatario estatal hizo énfasis en que además de los recortes mencionados durante el evento por el secretario de Finanzas, Héctor Apreza Patrón, hay una idea general que es cuidar el patrimonio público, manejar con pulcritud cada peso que gaste el gobierno estatal.

“Por eso, he instruido reiteradamente, y hoy lo ratifico a quienes integran mi gabinete, a impulsar medidas que garanticen una acción fundamental, importante reclamada por la sociedad: tolerancia cero a la corrupción; no hay espacio en esta administración para la corrupción, el abuso, la prepotencia y la deshonestidad.

Explicó que con el plan de austeridad, su gobierno pretende lograr que los guerrerenses sepan que se mantienen firmes los programas sociales, que los niños puedan ir a la escuela y encontrar su desayuno, que los jóvenes estudiantes sigan teniendo sus becas y ampliar este programa, como se anunció con la Beca de Excelencia Guerrero.

Además, que las mujeres y niños que acudan a las clínicas del sector Salud encuentren mejores y más medicamentos, que el campesino reciba el fertilizante gratuito para que produzca la tierra,  que el taxista asegure recursos para su familia y los adultos mayores sigan cobrando su pensión.

“Queremos que la gente sepa que el gobierno está tratando de hacer la parte que le corresponde a cada uno, frente a este problema que estamos enfrentando, que no es agradable, que no es deseable; y redoblar esfuerzos para lograr la sinergia con las medidas anunciadas por gobierno federal; se trata de unir fuerzas, para proteger la economía de los hogares del estado”.

Héctor Astudillo también reconoció la aportación del sector privado a estas medidas de austeridad frente la crisis del gasolinazo.

Agradeció a los productores del campo, a los grupos organizados del transporte que comprometieron el no incremento de las tarifas del servicio público, a los empresarios que son clave para que la economía marche bien y genere empleos.

Anunció que con los programas de becas y capacitación para el trabajo, con las inversiones que se impulsarán con el gobierno federal, se proyecta generar oportunidades de empleo dentro del proyecto de zona económica especial Puerto Unión, para lo cual se han destinado 100 millones de pesos estatales y se esperan 100 millones federales, para adquirir terrenos que detonen este proyecto.

Informó que la Comisión que dará seguimiento a estas acciones será encabezada por la exdiputada federal Ruth Zavaleta Salgado y estará integrada por secretarios y subsecretarios de las secretarías de Planeación y Desarrollo Regional, de Finanzas y Administración, de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, y de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural.

El gobernador invitó a los poderes Legislativo y Judicial, a aplicar medidas de austeridad como las anunciadas por el Ejecutivo.