Comienza el “Destrumpeñadero”
Por Felipe Victoria Zepeda
El guerrerismo “sierreño” y costeño de “trompezarse”, es para cuando alguien dice disparates por irse de la lengua sin antes conectarla al cerebro.
Grave cuando aquellos a quienes sus canchanchanes plagiadores de frases y conceptos, que toman de acá y de por allá frases y conceptos publicados en periódicos y revistas, para escribirles sus discursos a veces incongruentes y carentes de sustancia, se equivocan al leerlos y se “trompiezan”; lo bueno es que los acarreados aplauden sin ser necesario que hubieran entendido nada de sus cantinfleadas.
Tan solo restan veintidós meses de ese concurso cotidiano de oratoria hueca que debe ser aclamada a fuerza, e imitada por los subordinados que menos dejan en claro nada…
Como se extraña a los políticos a la antigua, que sin adornos tecnocráticos tenían el arte de ser coloquiales hablándole sencillo y en su idioma a la gente.
Quién no se acuerda de aquel sencillo profesor rural de Santiago Tianguistenco en el Estado de México, que tuvo el toque del Rey Midas convirtiendo en oro cuanto tocaba, pero convencía a la gente porque se le entendía todo lo que decía como si estuviera dando clase y le comprendían aquello de “político pobre es un pobre político”…
Nadie olvida al sempiterno líder de la clase obrera durante décadas hasta que por fin se quiso morir para descansar y, les decía que “el que se mueve antes no sale en la foto: Don Fidel Velázquez Sánchez, tampoco al dicharachero guerrerense Rubén Figueroa Figueroa con su “caballada flaca”, o su “artículo cero constitucional”, para sustentar sus caprichos ordenando que algo se hiciera “por sus huevos”…
Esa clase de políticos-políticos no utilizaba palabrejas extranjerizadas inentendibles para el pueblo, porque no pisaron universidades lejos de México pero no olvidaron sus valores ni la historia mexicana, así que fueron nacionalistas natos libres de influencias perniciosas; con ellos se tuvo un México en paz y progresando de alguna manera, con orden antes que nada y respeto a las autoridades sin que nadie se pudiera brincar las trancas.
Claro que hubo primitiva rudeza y excesos para sofocar inconformidades o hasta para acostar chaparros insurrectos y a los más peligrosos, de plano les daban el descanso eterno o los desaparecían, pero no había tanto escándalo aunque si leyendas negras tal vez exageradas…
En mala hora la clase tecnocrática de “Yupies” desplazó a los políticos de la vieja usanza, quizá no muy cultos pero con sensibilidad real, no con ocurrencias virtuales de mundos fácticos globalizados; a los delincuentes se les trataba como lo que eran, sin contemplaciones porque lo primero era mantener a salvo la integridad y bienes de la gente buena y pacífica, para que pudieran trabajar o estudiar en paz y con seguridad.
Cierto que nada es perfecto sino perfectible, pero las estrategias académicas contaminadas de otras idiosincrasias resultaron un fracaso en México.
Bien se lamentaba Porfirio Díaz de que México estaba tan lejos de Dios y tan cerca del Tío Sam. Toda Latinoamérica siempre ha sido su laboratorio de experimentación para provocar guerrillas, golpes de estado y gorilatos o dictaduras tiránicas, lo preocupante es que seguimos siendo el patio trasero de los USA y por eso el temible Kukuxklán Mister Donald Trump, a partir del viernes entrante nos hará vérnolas negras con su capricho de la versión moderna de la muralla china.
¿Qué estrategias comunes seguiremos los mexicanos para no tener tantos “trumpezones” como mal auguran?
Quizá lo más a la mano, fuera organizar un paro a en la producción y exportación de marihuana y derivados de la amapola suspendiendo el abasto de más de cuarenta millones de adictos en el feudo de Donald Trump, para que allá le hagan desmadres y revolución, en vez de aquí al atribulado presidente Peña Nieto, que ya no ve la suya porque se agotaron los huevos de oro de la gallina petrolera.
Algo tenemos que hacer ahora que México necesita de todos…
La raíz del mal está a la vista, pero falta decisión y valentía para poner los remedios ipsofacto, antes que vaya a ser otra la situación y las llamas se extiendan más…
Los entrelíneas recientes del verdadero jefe operativo del Ejército y el de la Armada no son tan indescifrables. Harán lo que el pueblo les mande en cuanto el comandante supremo efímero ya no esté en aptitud de ordenarles como antes de que se le perdiera la confianza, la fe y la credibilidad…
-¡Tilín, tilín!-Suena la campanita escolar.
-Maestra Pizarrina, ¿Cómo avizora el panorama pre electoral de este 2017?
-Ujule chamacos, como esa bonita canción de Emanuel, “todo se derrumbó”. ¿Y ustedes?
-Suponemos que la partidocracia tan corrupta y voraz comienza a tener estertores.
-¡Shhh…cábrense cayones!, aún quedan por ahí políticos confiables, pero muy escasos.
-Pues la mayoría de los de ahorita ya no convencen ni a sus familiares,teacher; nadie les cree ni la fecha ni la hora aunque sea y todos los partidos resultan vomitivos pues siguen en manos de los mismos clanes y ya no son ninguna opción…
-Me la ponen muy dura y pelona, ¿acaso en el futuro serán puras candidaturas independientes?
-Siempre y cuando no tengan que utilizar las estructuras de los actuales mercaderes de la democracia electoral…