* Víctor Ortega, dirigente de esa organización, dijo que los agremiados están dispuestos a comprar armas para poder defenderse de los delincuentes
Gilberto Guzmán
Debido a la inseguridad han cerrado alrededor de 85 negocios de los 600 agremiados a la Cámara Nacional de Comercio en la capital de Guerrero, razón por la que avalan la propuesta de adquirir armas para reforzar su seguridad, además de que recibirán capacitación para reaccionar ante la delincuencia común, ya que “contra la delincuencia organizada se requieren otro tipo de estrategias de mayor nivel”, dijo el dirigente de esa organización, Víctor Manuel Ortega Corona.
En entrevista en sus oficinas en el centro de Chilpancingo, el líder de los comerciantes establecidos dijo que en los seis meses que lleva al frente de la Canaco ha constatado la problemática que enfrentan los empresarios locales, principalmente con el tema de la inseguridad.
“El tema de la inseguridad, sin duda alguna, se correlaciona en forma importante con el crecimiento económico; uno de los factores que han incidido en la disminución del poder de venta de nuestros compañeros comerciantes, ha sido precisamente el tema de la inseguridad, que tanto hemos denunciado, y que creo que vamos a vivir un rato más con él”, dijo el dirigente.
En cuanto al número de comercios cerrados como consecuencia de la violencia en Chilpancingo, Ortega Corona señaló que la Canaco registra alrededor de 85 de los 600 que están agrupados en este organismo empresarial.
Recordó que hace algunas semanas, el alcalde de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena manejaba la cifra de solo 23 negocios cerrados, lo cual “puede ser entendible porque él tiene que dar cifras oficiales, pero tanto la Coparmex como nosotros, tenemos datos que recibimos de manera directa de nuestros afiliados, todavía quedan fuera los que no están afiliados en ninguna de las dos organizaciones”.
Indicó que los giros más representados en la Canaco Chilpancingo van desde las misceláneas o tiendas de conveniencia, hasta comercializadoras y empresas constructoras, y de éstos los que más han cerrado son los negocios pequeños, principalmente las misceláneas ubicadas en el primer cuadro de la ciudad.
“Causas, factores, han sido definitivamente las marchas, los bloqueos, los asaltos, las extorsiones que ocupan el primer lugar, son cuestiones de inseguridad, hasta cuestiones de tipo social”, explicó Ortega Corona.
El líder empresarial agregó que después de que por intervención del gobernador Héctor Astudillo se liberó la plancha del zócalo de Chilpancingo, donde el magisterio disidente de la CETEG mantenía un plantón, comenzó a recomponerse un poco la situación de las ventas, porque los ciudadanos pudieron volver a visitar la zona.
“Sin embargo, la inseguridad es la principal causa de la disminución de las ventas en perjuicio del crecimiento económico de nuestros compañeros”, insistió.
A pregunta expresa, dijo que la Canaco comparte el planteamiento de los empresarios de la Coparmex de portar armas para protegerse ante el aumento de la violencia, que los mantiene asolados, los obliga a cerrar negocios y a otros más a irse de Chilpancingo.
“Por supuesto que la compartimos, y cualquier ciudadano común en su propio domicilio, ante la inseguridad, también tiende a realizar estas acciones, estas estrategias, y como comerciantes también, siempre en el marco de la ley, es decir con los permisos correspondientes de la Sedena, en cuanto al calibre o el tipo de arma que está permitido para poder defenderse”.
Además, anunció que en próximos días los empresarios agrupados tanto en la Canaco como en la Coparmex recibirán un curso de capacitación para que puedan defenderse, principalmente de la delincuencia común, “porque contra la delincuencia organizada se requieren otro tipo de estrategias de mayor nivel”.