* En 15 meses, en Guerrero se registró más del 45 por ciento de las quejas por violencia obstétrica, expuso el presidente de la Comisión de Salud

 

Gilberto Guzmán

 

Diputados del Congreso local exhortaron al Ejecutivo Estatal para que instruya al secretario de Salud, Carlos de la Peña Pintos, a realizar un diagnóstico de las necesidades de recursos materiales y humanos, así como una planeación presupuestal para que los Hospitales Generales y los de la Madre y El niño Guerrerense, cuenten con lo necesario para brindar un buen servicio en materia de atención obstétrica.

La propuesta de acuerdo parlamentario fue presentada por el presidente de la Comisión de Salud de la 61 Legislatura, Raymundo García Gutiérrez, en la sesión de este jueves.

El diputado dijo en tribuna que la violencia obstétrica en la entidad es un problema que afecta a un gran número de mujeres, y que el tema ha sido materia de análisis por diversos organismos locales, nacionales e internacionales.

Como ejemplo, en el documento del acuerdo se expone “el caso suscitado en el año 2014 en contra de una paciente amuzga, quien perdiera la vida a consecuencia de violencia obstétrica, derivada de una inadecuada atención médica” en el Hospital General del Municipio de Ometepec, asunto que en últimas fechas ha vuelto a ser noticia al emitir la Comisión Nacional de Derechos Humanos la Recomendación 46/2016, al Poder Ejecutivo del Estado.

La recomendación, agrega, “ha puesto a Guerrero de nueva cuenta en el ojo del huracán a nivel Nacional.

El diputado señaló en tribuna que dentro de las obligaciones constitucionales que el Estado tiene frente a sus gobernados, se encuentra la de velar por el derecho a la salud, para lo cual debe implementar a través de sus instituciones programas de prevención, promoción, recuperación y rehabilitación, a fin de procurar otorgar a los habitantes el más completo bienestar físico, mental y social, de acuerdo con lo establecido en el artículo 4 de la Carta Magna.

Indicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que el derecho a la salud incluye el acceso oportuno, aceptable y asequible a servicios de atención de salud de calidad suficiente.

Además, la Observación General número 14 del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, de los Derechos Humanos, establece los siguientes estándares, en relación al derecho a la salud:

Disponibilidad, significa que los Estados deben crear toda la infraestructura de salud necesaria en todo su territorio; y Accesibilidad, que la infraestructura y los servicios de salud sean accesibles a todas las personas sin discriminación, por lo cual se subdivide en Accesibilidad física, para que los centros de salud estén ubicados cerca de todas las comunidades, y Accesibilidad económica, para que todas las personas tengan acceso al nivel más alto posible de servicios de salud, independientemente de sus ingresos.

García Gutiérrez expuso que los problemas que existen en el ámbito de salud, como la inadecuada atención médica a las madres embarazadas, o violencia obstétrica, es definida por la Organización Mundial de la Salud, como “todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada”, y deben de ser enfrentados sin dilación ni distracción.

Destacó que actualmente la violencia obstétrica se ha vuelto un problema grave en la entidad, y de acuerdo con las cifras emitidas por el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) en su “Informe sobre Violencia Obstétrica 2015”, en las unidades de las Secretarías de Salud Estatales del país durante el periodo enero de 2014 y junio de 2015, se recibieron un total de 216 quejas por negligencia y 266 por violencia obstétrica, de las cuales el estado de Guerrero registró la cantidad de 130 quejas recibidas por concepto de violencia obstétrica y 44  por malos tratos y negligencia (29 por malos tratos y 15 por negligencia).

“Es decir, en Guerrero se dieron más del 45 por ciento de las quejas por este tipo de violencia. Y en lo que va del año 2016, solo en la región de la Costa Chica, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, por conducto de su Delegación Regional ha registrado 18 quejas por negligencia médica y violaciones a la Salud en contra de los hospitales de esa zona”, detalló el diputado.

Mencionó que estas cifras resultan alarmantes y muestran que en los hospitales de la entidad no se está brindando una atención médica adecuada en los estándares necesarios para las mujeres embarazadas, por lo cual es necesario combatir el problema en todos los hospitales dependientes de la Secretaría de Salud estatal.

El acuerdo parlamentario aprobado por unanimidad, exhorta al titular del poder Ejecutivo a instruir al Secretario de Salud a que realice un diagnóstico de las necesidades de recursos materiales y humanos, así como una planeación presupuestal para que los Hospitales Generales del Estado de Guerrero y los de la Madre y el Niño Guerrerense, cuenten con la infraestructura necesaria para proporcionar atención médica oportuna a los usuarios, para lo cual se deberá dotar de medicamentos, mobiliario, equipo médico en buenas condiciones, de infraestructura óptima, así como del personal médico necesario y adecuadamente capacitado.

Además, que diseñe e imparta cursos integrales de capacitación y formación a todos los servidores públicos adscritos a éstos hospitales, en materia de derechos humanos de mujeres, niñas y niños, que garantice el trato digno y la situación de vulnerabilidad de diversos grupos, con perspectiva de género transversal, y de conocimiento, manejo y observancia de las normas oficiales mexicanas.