* El dirigente empresarial Joaquín Badillo aseguró que el sector productivo del puerto se siente desprotegido y temeroso debido a la inseguridad

 

ANA LILIA TORRES

 

ACAPULCO.— Acapulco sobrevive gracias a sus playas y su gente, a pesar del recrudecimiento de la violencia, aseguró Joaquín Badillo Escamilla, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), quien expresó que el sector productivo de Guerrero se siente desprotegido y temeroso, porque no ve alternativas que puedan dar solución a este clima de inseguridad.

El dirigente empresarial lamentó que se esté flagelando continuamente al puerto con mayor violencia cada día y que las autoridades no hagan nada por resolverlo.

“Lamentamos profundamente este acto de flagelar al puerto de Acapulco, por parte del crimen organizado”, reprochó el también consejero de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

Señaló que para los empresarios resulta increíble ver como en el pasado puente vacacional, hubo un repunte de violencia y se atentó contra la vida de personas, generando un ambiente de psicosis.

Aunque estos acontecimientos sean producto de pugnas entre  bandas delictivas del crimen organizado que pelean territorios, “esto no debe ser motivo para que la autoridad, y llámese principalmente puerto de Acapulco, no intervengan de manera contundente”.

Lamentó que por el repunte de asesinatos, extorsiones y secuestros, el sector productivo se siente desprotegido, temeroso y no ve alternativas que puedan dar solución a este clima de inseguridad en Acapulco y en Guerrero.

Badillo Escamilla reconoció que afortunadamente el turismo sigue llegando a Acapulco y deja una importante derrama económica que beneficia al puerto.

“Nosotros agradecemos a este turista, este turista temerario que a pesar de las balas viene a Acapulco, a pesar de todo lo que se dice de nosotros por la violencia”, enfatizó el presidente del CEE.

Explicó que en medio de este clima de inseguridad, Acapulco sobrevive gracias a sus playas y su gente, porque la autoridad está reprobada, indicó el representante empresarial.

Reprochó que el gobierno municipal no ha podido certificar policías, ni prevenir el delito, mucho menos dar garantías a sus ciudadanos, por lo que no hay condiciones para que el sector productivo pueda sentirse por lo menos protegido.