* Roberto Álvarez, también vocero de Seguridad, pidió a los presidentes municipales involucrarse en las acciones de combate a la delincuencia y no dejarlo todo a los gobiernos estatal y federal
* La violencia extrema registrada el fin de semana no es atribuible “a la inacción de las autoridades que han hecho su trabajo de manera coordinada y unida”
Jesús Saavedra
El delegado de Gobernación y vocero del Grupo de Coordinación Guerrero (GCG), Roberto Álvarez Heredia, afirmó que para que haya una mayor efectividad en la estrategia de seguridad en la entidad, los 81 presidentes municipales deben dejarse de “hacerse de la vista gorda” e involucrarse, porque no pueden dejar esa responsabilidad exclusivamente al gobierno del estado o la federación.
El funcionario federal se refirió a los hechos de violencia del fin de semana y aseguró que no son atribuibles “a la inacción de las autoridades que han hecho su trabajo de manera coordinada y unida”, y explicó esa violencia tiene su origen en la disputa por el territorio de los grupos del narcotráfico.
Enfático dijo además que en materia de seguridad “no ha sido rebasado el trabajo de las autoridades” por el accionar de los grupos criminales, porque “ha habido un trabajo muy consistente de las autoridades”, aunque “obviamente se tiene que hacer un análisis de la situación e identificar los puntos donde hay que reforzar, los puntos donde pudiera hacerse algunas correcciones a la estrategia de seguridad”.
Álvarez Heredia adelantó que tras la reunión del GCG, el lunes pasado, “se hará un replanteamiento del esquema de seguridad, se van a instalar tres Bases de Operaciones Mixtas (BOM) en Zitlala, Chilapa y Tixtla; obviamente puestos de revisión de personas, vehículos y transporte público; también en la parte de la Tierra Caliente tres BOM con puestos de control en la carretera” que comunica a los municipios de esa región.
En ese sentido, el delegado de Segob subrayó que han solicitado “a los grupos civiles armados (policías comunitarios) que permitan el trabajo de las autoridades, porque tampoco se puede mezclar la presencia del Ejército con la presencia de grupos civiles armados, eso pondría en riesgo obviamente la integridad de ambos lados”, dijo refiriéndose a los elementos de la policía ciudadana Tecampanera que están movilizados desde hace un par de semanas en Teloloapan.
Ante los cuestionamientos de los reporteros, reiteró que “no ha fallado la estrategia, lo que hay es un desafío de la delincuencia, la delincuencia actúa y la responsabilidad de la autoridad es obviamente ubicar, detener, contener, hacer su trabajo”.
Ejemplificó que la estrategia de seguridad “es una mesa sustentada en cuatro patas, la parte federal, estatal, municipal y de la sociedad”, y aunque “la parte federal con el estado trabajan de manera unida y coordinada para fortalecer las acciones contra la delincuencia, la pata que está coja es la parte municipal”.
Por eso dijo que “es necesario ampliar las capacidades de las policías de los 81 ayuntamientos, esa parte es fundamental para avanzar en la estrategia de seguridad y la participación ciudadana a través de la denuncia anónima; el otro componente es que la gente tiene que denunciar los cobros de extorsión, la gente tiene que denunciar ante las autoridades”.
Álvarez Heredia aceptó que revertir los índices de violencia en Guerrero “no es sencillo, se requieren recursos económicos, voluntad de los presidentes municipales, de no hacerse de la vista gorda, tienen que participar con mayor ahínco en las tareas de seguridad en los municipios, para que junto con el estado, con la fuerza estatal, federal, Ejército y Marina, pero hace falta trabajar sobre todo en el orden municipal, es la parte que es necesario trabajar mucho más para fortalecer la estrategia de seguridad”.
En otro tema, respecto a las fosas clandestinas que hallaron en un campamento en Zitlala, dijo que hasta el momento se han rescatado siete cuerpos que fueron trasladados al Servicio Médico Forense en Chilpancingo “para iniciar los análisis y extraer su perfil genético, una vez que se tenga el perfil genético que dura alrededor de nueve a diez días, lo van a contrastar con los perfiles genéticos que están en las bases de datos de la PGR y la Fiscalía a efecto de poder encontrar la posible identificación de los mismos”.
El funcionario estatal señaló que no puede adelantar si esos cuerpos podrían pertenecer a la familia de Zitlala que fue privada de su libertad hace más de un mes.
“Vamos a dejar que la Fiscalía termine sus análisis de dichos restos humanos e identifique a quienes pertenecían, no puedo adelantar o suponer nada; en este momento continúan las excavaciones al parecer hay otros sitios donde pudiese haber fosas, entonces se están siendo analizadas por los peritos que se quedaron en ese lugar desde este martes”, concluyó.