Isidro Bautista

 

Héctor Apreza Patrón, secretario de Finanzas del gobierno de Héctor Astudillo Flores, declaró en Tixtla, este martes (La Jornada Guerrero 16/nov/16), que hasta el lunes pasado había en su escritorio trece de los 81 ayuntamientos de Guerrero con solicitud de apoyo financiero para poder realizar los pagos de fin de año, en diciembre próximo, aunque no mencionó los nombres de los municipios.

Según la nota, el político de Olinalá, ex presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, ex dirigente estatal del PRI y ex alcalde de aquel municipio de la región de la Montaña de la entidad, advirtió que no ayudarán a los alcaldes que hayan ejercido de manera irresponsable los recursos públicos.

Si a ésas fueran, entonces no ayudarían a ninguno, porque todos los ayuntamientos, al igual que el gobierno del estado, deben ahorrar al menos cada mes para solventar sus obligaciones de fin de año con la clase trabajadora.

La federación les entrega sin ningún pretexto o motivo, a través del gobierno del estado, sus participaciones de gasto corriente dos veces al mes —en la primera y a más tardar en la tercera semanas— y, como es sabido, algunos establecen un convenio mediante el cual solicitan que se les retenga determinado porcentaje como ahorro, claro los que realmente actúan con responsabilidad, para cumplir con dicha obligación.

Los hay, como los ediles de la región de la Montaña, la más pobre de la entidad, que de su gasto corriente agotan hasta el último centavo con exageración, dándose una vida de lujos. Comen y beben como nunca en la vida. Ven cómo comprobar sus egresos, aunque los haya por conceptos personales, olvidándose de las obligaciones contraídas con los trabajadores.

Se ha visto a varios de ellos con derroche de recursos en Acapulco, con el pretexto de realizar una visita por trámites o gestiones. Hasta amantes llevan. No tienen medida en sus gastos. Sí se acuerdan de las obligaciones de fin de año con sus trabajadores, pero los pasan por alto.

Como han visto que el gobierno del estado les ha prestado el recurso, pues esperan el día indicado para solicitar un préstamo, a cuenta de sus participaciones, sin reparar en el posible hecho de que aquél les contestara que no está en condiciones financieras de otorgar su petición financiera, para que les estallara una bomba.

Chilpancingo es un ejemplo. Frecuentemente los trabajadores, principalmente de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado, se instalan en plantón por no cobrar a tiempo sus emolumentos o ciertas prestaciones sociales, sobre todo durante lo que va de la administración del alcalde Marco Antonio Leyva Mena.

Todos los presidentes municipales están en condiciones de ahorrar.

¿Quién no puede asegurar que presidentes municipales pudieran resultar unos Padrés, ex gobernador de Sonora, sometido en cárcel por defraudación fiscal y lavado de dinero; Duarte, con 35 mil millones de pesos faltantes en las arcas del gobierno veracruzano; Borge, por la enajenación ilegal de 9 mil 500 hectáreas, que representan más de seis veces la superficie de la zona hotelera de Cancún, o de plano Anaya, dirigente nacional del PAN, que según una encuesta de Comunicación Estratégica dada a conocer antier por El Universal, elevó la percepción negativa en la sociedad por la vida de lujo que le fue descubierta en Estados Unidos?

Y ahora salió a relucir el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero con un faltante millonario, o un Rogelio Ortega Martínez, su sucesor en el cargo, con la versión de que se hizo propietario hasta del hotel Villa Vera en el puerto de Acapulco.

Héctor Astudillo enfrenta un déficit financiero de casi 20 mil millones de pesos. Y todavía se tiene un rector en la Universidad Autónoma de Guerrero —Javier Saldaña Almazán— al que ya se le señala como un nuevo millonario del estado, con títulos profesionales falsos, y que quiere reelegirse para hacerse todavía más rico, de tal forma que no hay ni a quién irle.

Falta que tengan la desfachatez de confesar, como lo hizo el alcalde de San Blas, Nayarit, Hilario Ramírez “Layín”, que nada más han robado “poquito”, y que aun así, quieren que les ayuden a pagar sus gastos de fin de año, porque prefirieron no ahorrar.

Guerrero no merece más malos gobernantes. isidro_bautista@hotmail.com