¿Usted piensa no morirse?…
Por Felipe Victoria Zepeda
Quizá los mexicanos en lo que más frecuentemente pensamos es en cómo y cuándo nos tocará morir, pero como eso nos aflige y espanta tratamos de darle la vuelta y muchos prefieren que la muerte los coja desprevenidos.
Hace poco en septiembre, como desde hace varios años ya, los Notarios Públicos organizaron su campaña para que las personas hicieran testamento y no dejen broncas a los familiares que hasta por un cacahuate se pelean llegado el momento.
Si algo resulta negocio litigar, aunque tardado, son los juicios intestamentarios y en muchos casos el ganón es el gobierno quedándose con los bienes a beneficio de la asistencia pública, todo porque la gente teme pensar seriamente en lo que no podrá evitar.
Sin embargo, el sentido del humor de los mexicanos encuentra fugas y las cuestiones en cosas penosas las convierte en divertidas, en rituales religiosos y hasta en canciones vernáculas como José Alfredo Jiménez…¿quién dijo miedo si para morir nacimos?
Agradezco a mi pariente Santiago Rocha el envío que me hizo por Internet de lo que les transcribo:
“La muerte es un lugar al que todos nos dirigimos, ese destino inexorablemente compartido. Como sabemos, en México la relación con la muerte es especial, en buena medida por la herencia de la cosmovisión prehispánica. Los antiguos mexicanos rendían culto a la muerte, convivían con ella de forma ritual y cotidiana, invocaban a sus muertos en distintos momentos y les ofrecían alimentos que habían sido de su gusto en vida.
Hoy esta costumbre se conserva con el Día de Muertos. Pero más allá de esta celebración, muestra infalible de la relación del mexicano con la muerte, está también la sabiduría, y la picardía nihilista, condensada en frases y refranes sobre la muerte. En México a la muerte se le “normaliza”, y en ocasiones se encubre con algo de humor, acaso porque es tan normal como la vida misma.
La muerte es vida, al menos cuando se trata de refranes sobre la muerte que viven cotidianamente entre nosotros:”
Me envió también una buena compilación de dichos populares sobre la muerte:
¿Por qué temer la muerte? Si mientras existimos, ella no existe y cuando existe la muerte, entonces, no existimos nosotros.
Los muertos al cajón y los vivos al fiestón
Entre flores nos reciben y entre ellas nos despiden
Antes muerta que sencilla.
La muerte está tan segura de alcanzarnos que nos da toda una vida de ventaja
Cuando te toca, aunque te quites… y cuando no, aunque te pongas
El muerto al pozo y el vivo al gozo
De gordos y glotones están llenos los panteones
Buen amor y buena muerte, no hay mejor suerte
Cuando vivía el infeliz ¡Ya que se muera! Y hoy que está en el veliz ¡Ay, qué bueno era!
Si me han de matar mañana, que me maten de una vez
Mejor que digan que aquí corrió, que aquí murió
No andaba muerto, andaba de parranda
Matrimonio y mortaja, del cielo bajan.
El matrimonio es la vida o la muerte; no hay término medio
El que por su gusto muere hasta la muerte le sabe
Mujeres juntas solo difuntas
Poco veneno no mata
Vale más un cobarde en casa, que un valiente en el cementerio
Al vivo todo le falta y al muerto todo le sobra
De pendejo me muero este año
Se lo llevó la huesuda
El asno sólo en la muerte halla descanso: anónimo
Lo que mata no es la muerte, sino la mala suerte: anónimo
Ya se lo llevó la flaca
Ya colgó los tenis
Ya chupó faros
Ya estiró la pata
El que a hierro mata, a hierro muere
Uno propone, dios dispone, llega la muerte y todo lo descompone
A mí que ni me cuelguen ese muertito
El muerto y el arrimado a los tres días apestan
El miedo no anda en burro
Muerto el perro, se acabó la rabia
En este mundo matraca de morir nadie se escapa
Muerto el ahijado, se acabó el compadrazgo
Cayendo el muerto y soltando el llanto
El pez por la boca muere
Como dijo el payaso en su lecho de muerte… me voy, ¡no los entretengo más!
Los cobardes mueren muchas veces los valientes solo una
Caite cadáver
Al muerto y al consorte, a los tres días no hay quien los soporte
Todo hombre muere, no todo hombre vive
Más vale un minuto tarde que un minuto de silencio
Lo que no mata, te fortalece”.
No puedo ser el muerto y echarme la tierra encima
Donde se queja el muerto, es que ahí está el oro
Nadie sale vivo de esta vida
*Si conoce más refranes o frases, compártalas con nosotros y los lectores en sus amables comentarios.
-¡Tilín,tilín!, suena la campanita escolar
-Maestra Pizarrina ¿por qué algunos adultos gruñones nos regañan si vamos a pedirles dulces o la calaverita en nuestro desfile de Halloween?
-Miren chamacos, se trata de preservar valores y tradiciones mexicanas, ustedes no son gringuitos…
-¿Es eso de ponerles altares y ofrendas a los parientes difuntos e ir a echar relajo a los panteones?
-No se quejen, de todos modos los guisos y platillos especiales nos los comemos los vivos a final de cuentas…