* Pepe Armenta revierte inercias en Sedatu

* Recomponer fallas, tarea de un año y 8 meses

* Hay acuerdos con PROFEPA sobre suspensiones

 

Jorge VALDEZ REYCEN

 

A un año y 8 meses de haber asumido la delegación de la Sedatu, Pepe Armenta Tello evaluó que se han sorteado fallas, inercias y mal manejo en la reconstrucción de viviendas para los damnificados de los huracanes “Ingrid” y “Manuel”, desde septiembre del 2013.

Sin prisas, pero con efectividad, la Sedatu ha recompuesto el tejido social de un sector que sufrió afectaciones en sus patrimonios por fenómenos hidrometeorológicos. Sin echar las campanas a vuelo, con seriedad y sin crear falsas expectativas, la delegación federal va avanzando en la reconstrucción de algunas viviendas que se edificaron fuera de la normatividad.

Uno de esos casos que más costo en tiempo ha tenido, es la regularización de terrenos donde se edificaron viviendas, ya que una gran mayoría estaban irregulares, sin haber pagado a los dueños por sus tierras. Eso desfasó las acciones, reconoció Armenta.

La tarea ha sido ardua e incansable en un año y 8 meses de gestión. No se entenderían los avances, sin el apoyo del gobierno estatal que encabeza el gobernador Héctor Astudillo Flores, señaló el funcionario federal.

Con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), con Marisela Ruiz Massieu al frente, ha sido receptiva y sensible a las negociaciones que se realizan para levantar los sellos de suspensión y clausura de obras, ante la ausencia de peritajes sobre el impacto ecológico y ambiental en las tareas de reconstrucción de espacios de vivienda a damnificados.

Por la premura de hacer rápido una reconstrucción, se incurrió en fallas y errores que provocaron demoras, suspensiones y un mal manejo.

–Han pasado muchos meses, es verdad, pero desde que asumí este encargo hemos puesto el mejor esfuerzo de avanzar en la entrega de viviendas. No hay ninguna intención de echar culpas a otras instancias, pero sí existen causas que demoraron la reconstrucción, expresó Pepe Armenta.

La Sedatu construye 22 fraccionamientos para damnificados en las regiones que más sufrieron daños por las fuertes precipitaciones pluviales que causaron deslaves en localidades, con la pérdida de viviendas y hasta de vidas humanas.

La regularización de 80 terrenos que se destinaron para la edificación de dichos núcleos habitacionales no contaban con el pago de afectaciones a los dueños, situación que derivó en molestias y enojos de propietarios, con quienes ya existen meses de diálogo y negociación para alcanzar acuerdos y pagarles.

Los recursos federales que destina la Sedatu en Guerrero no tuvieron recortes en este año, lo que provocó que otros programas tuvieran un impacto más directo en su concretización, como los espacios públicos, parques y áreas de disfrute deportivo y cultural.

Una vez que se regularicen los 17 terrenos que aún están en proceso, se revertirá la tendencia que se tenía hace casi dos años, cuando eran 15 los regularizados, de un total de 80. Ese es el trabajo que no se percibe, pero se está haciendo.

La reconstrucción en Guerrero estará concluida en el próximo año 2017, tal como ha sido el compromiso de la secretaria Rosario Robles Berlanga, representante personal del Presidente de México, Enrique Peña Nieto y encargada de la encomienda y la palabra presidencial empeñada.

Pepe Armenta confió que se entregarán buenas cuentas a los guerrerenses que sufrieron en carne viva los estragos de fenómenos naturales.

De todas las delegaciones federales, la Sedatu es la que mejor manejo de medios ha tenido y su presencia informativa ha sido desplegada en radio, prensa y televisión.

Nos leemos… SIN MEDIAS TINTAS.