* Invitado por el Grupo Aca, el alcalde de Tixtla advirtió que no es él quien está en contra de la construcción de depósito de basura en Matlalapa, sino los ciudadanos y que estos están dispuestos a tomar el predio

 

ANA LILIA TORRES

 

ACAPULCO.— El presidente municipal de Tixtla, Hossein Nabor Guillén, afirmó que no es él quien está cerrado a la construcción del relleno sanitario de Chilpancingo en la comunidad de Metlalapa, sino que son los propios ciudadanos quienes no lo aceptan y advirtió que están dispuestos incluso a unirse para tomar el terreno.

Entrevistado al terminar la sesión del Grupo Aca, a la que asistió como invitado, el alcalde de Tixtla señaló que la única opción que propone al presidente municipal de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena, es que busque otro terreno para instalar el basurero, donde no se genere un conflicto político.

“Va mi propuesta: busquemos otro terreno que no genere conflicto político, porque ahí la sociedad de Tixtla se va a unir y va a tomar el terreno” donde ya se construyó una celda emergente, señaló.

Durante la sesión con los acasocios, Nabor Guillén explicó que la negativa del Cabildo de Tixtla a la construcción del depósito sanitario, se debe a que la compañía sólo les presentó la “parte bonita” del proyecto; les dijo que se trataba de una separación en el manejo de desechos sólidos y nunca se habló del relleno.

“Ellos hablaron de una planta, fueron a Monterrey a conocer el funcionamiento de una planta tratadora de basura, de cómo funciona como negocio, pero no hablaron del relleno, son dos cosas diferentes”, señaló.

Recordó que el proyecto surgió en el año 2014, cuando los entonces alcaldes de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, y de Tixtla, Gustavo Alcaraz, hicieron un convenio intermunicipal para la construcción del basurero, pero fue de manera unilateral, sin sustentarlo con actas del Cabildo, que es la máxima autoridad de un municipio.

El miércoles pasado, el invitado de Grupo Aca fue el alcalde de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena, quien acusó directamente a Hossein Nabor de empantanar el proyecto del basurero municipal por sus intereses personales políticos.

Al respecto, el alcalde tixtleco dijo que conoce el proyecto y en que consiste, pero el Cabildo determinó rechazar el relleno sanitario, de manera que “no es que se cierre el presidente de Tixtla, el Cabildo dijo no y ahí tenemos compañeros del PRI, PT, Morena y PRD que votaron en contra, sin excepción”.

Manifestó que hay propuestas de desarrollo intermunicipal con las que sí están de acuerdo, como la instalación de un rastro TIF y una central de abastos, pero “un relleno sanitario que va a generar conflictos no va a aceptarlo nadie”.

Dijo que hay 15 organizaciones que por escrito han advertido al Congreso del Estado que no van a permitir la instalación del basurero, por lo que sí existe una amenaza de conflicto político en caso de que el ayuntamiento de Chilpancingo siga adelante con el proyecto.

Señaló finalmente que el estudio de impacto ambiental presentado por el gobierno municipal capitalino no tiene vigencia y que fue hecho por la Secretaría del Medio Ambiente del estado (Semaren), cuando lo que se requiere es uno elaborado por una instancia federal.