* Después de comparecer ante diputados locales, Xavier Olea declaró que ya hay dos presuntos responsables del asesinato del alcalde de Pungarabato detenidos, pero no abundó más

 

* Reveló que en lo que va del año en Guerrero se han registrado mil 251 homicidios dolosos y 11 feminicidios, han obtenido 68 autos de formal prisión de delincuentes y 56 sentencias por el mismo delito

 

Salvador Bello / Fernando Hernández

 

Luego informar ante diputados que suman mil 251 los homicidios registrados en Guerrero en lo que va del 2016, el Fiscal General del Estado (FGE), Xavier Olea Peláez, reveló que dos personas fueron detenidos como presuntos participantes en la ejecución del alcalde Ambrosio Soto Duarte, ocurrido en Michoacán el pasado 23 de julio.

El presidente municipal de Pungarabato fue por un grupo de sujetos armados cuando regresaba a Ciudad Altamirano de Huetamo, Michoacán, alrededor de las 10:30 de la noche. En el ataque también perdió la vida su chofer y familiar, Omar Macedonio; entonces, por el calibre de las armas utilizadas en la emboscada, la Procuraduría General de la República (PGR) atrajo las investigaciones del caso.

Este martes, Olea Peláez compareció ante los diputados locales donde reveló que del 1 de enero al 30 de julio del presente año se han registrado mil 251 homicidios dolosos, 426 homicidios culposos, se han obtenido 68 autos de formal prisión por homicidios dolosos, 56 sentencias condenatorias por el mismo delito y 100 homicidios dolosos en contra de mujeres, de los cuales 11 fueron tipificados como feminicidios.

Luego de comparecer ante los legisladores, en entrevista el fiscal guerrerense informó que dos personas fueron detenidas como presuntos participantes en la ejecución del alcalde Ambrosio Soto Duarte, pero dijo que debería guardar silencio por el sigilo de las investigaciones del caso.

Se quejó porque aseguró que recibió en calidad de “chatarra” el parque vehicular de la Fiscalía y que esto provocó que se quedaran en la sierra cinco vehículos de la Policía Ministerial por descomposturas como llantas ponchadas o motores desbielados.

Lamentó que se vieron superados por los ministeriales michoacanos cuando llegaron a investigar el crimen del alcalde, porque, indicó, llegaron a las áreas de investigación a bordo de 65 camionetas nuevas y seis helicópteros, mientras que los de Guerrero llegaron con 45 vehículos “chatarra”, por lo que con eso quedó evidenciada la precariedad en el equipo tecnológico y parque vehicular de la Fiscalía guerrerense.

También informó que los tres agentes de la Policía Ministerial que fueron asesinados en Tixtla, la semana pasada, estaban por cumplir con la detención de uno de los líderes de cártel de Los Ardillos en esa zona del estado.

Por último, el fiscal dijo que dos funcionarios de la Fiscalía, cuyos nombres no reveló, fueron dados de baja y puestos a disposición de la Subsecretaría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), por tener presuntos vínculos con la delincuencia organizada.

Tras estas declaraciones, Olea Peláez se negó a contestar más preguntas de los medios de comunicación y su personal de seguridad le abrió paso entre los reporteros, para que pudiera salir del recinto parlamentario.