Andrés Gutiérrez

 

Sujetos armados ‘levantaron’ al profesor de la normal de Ayotzinapa, Gelacio Navarrete Morales, en pleno centro de la ciudad de Tixtla, y horas después, su cadáver fue encontrado embolsado y tirado en un basurero, a orilla de la carretera Chilpancingo-Tixtla, cerca de los puntos conocidos como “El Basurero” y “El Cerro de Machohua”.

Según testigos de los hechos, aproximadamente a las 09:30 horas, el profesor Gelacio Navarrete Morales, de 50 años de edad, con domicilio en la calle “Hermanos Héroes” casi frente a la unidad deportiva, , conducía su auto de la marca Volkswagen, tipo Jetta color azul marino, con placas de circulación MJR-27-24 del estado de México, sobre la calle José María Morelos y Pavón, pero cuando se encontraba a unos pasos de la tienda Superla, frente a las oficinas del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero, delegación Tixtla, a dos cuadras del Palacio Municipal, varias personas que viajaban a bordo de dos camionetas, le cerraron el paso con las intenciones de llevárselo, pero el maestro se resistió y negó abrir la puerta de la unidad, por lo que los presuntos delincuentes le dispararon, lo sacaron del vehículo, lo arrastraron y lo recostaron momentáneamente en la banqueta mientras se cercioraban si estaba vivo o muerto.

Después, lo obligaron a subir a una de sus camionetas y se dieron a la fuga con dirección al barrio del Santuario y de ahí tomaron la carretera federal rumbo a Chilpancingo.

Fue hasta las 15: 00 horas cuando reportaron que sobre el lugar antes mencionado se encontraba una persona ya sin vida.

Elementos de la Policía Municipal de Chilpancingo y Tixtla se trasladaron al lugar, y localizaron el cuerpo del profesor, al que habían metido en bolsas negras.

La zona fue acordonada por las autoridades, mientras que peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) y el agente del Ministerio Publico se encargaron de realizar las diligencias correspondientes.

Personal del Servicio Médico Forense (Semefo) se llevó el cuerpo a sus instalaciones, en donde más tarde fue reclamado por el que fuera su hijo, Guadalupe Navarrete Cruz.

Gelacio Navarrete Morales, tenía más de ocho años laborando para la escuela normal de Ayotzinapa y actualmente impartía el Taller de Talabartería.

La Fiscalía General del Estado, informó en conferencia de prensa que el profesor fue herido de bala, privado de su libertad y entregado a un grupo de la delincuencia organizada, que no pudo ser identificado.

También precisó que los familiares no interpusieron ninguna denuncia ante el organismo, pero que por oficio se había abierto una investigación para dar con el paradero del docente y de sus captores.

La Normal Rural, hasta esta hora no había emitido ningún posicionamiento al respecto.

Navarrete Morales se caracterizó por su cercanía al movimiento de Ayotzinapa, desde 2011, tras el asesinato de dos estudiantes en un desalojo en la Autopista del Sol. Fue parte del Comité de lucha de los egresados de la Normal desde 2012, para acceder a plazas docentes, incluso en las movilizaciones en oficinas y avenidas.

Como parte del club de Tiro y Caza “Vicente Guerrero” de la ciudad de Tixtla, realizaba labores de reforestación de árboles y magueyes en coordinación con los estudiantes de esta escuela, al grado que era considerado uno de los “tíos”, título que le asignan a personas muy allegadas a la institución, como lo son ahora los padres de los 43 desaparecidos. (Con información de API)