* “Debemos entender que un homicidio de una mujer no es un feminicidio”, asegura el vice fiscal, José Antonio Bonilla, quien anunció creación de Unidad de Género que investigará homicidios de féminas
Jesús Saavedra/Salvador Bello
De acuerdo con datos oficiales de la Fiscalía General del Estado, en cuatro años han asesinado a 870 mujeres en Guerrero, pero sólo 46 de esos casos se pueden tipificar como feminicidios, por lo que se considera que las feministas que han solicitado a la Secretaría de Gobernación (Segob) decretar la alerta de género en nuestro estado no están buscando la “medicina correcta” para atender ese problema.
Este martes, en la sala de juntas de la FGE hubo conferencia de prensa en donde se abordó el tema de la solicitud de alerta de género de grupos feministas, por lo que el titular de la dependencia, Xavier Olea Peláez, pidió a su vice fiscal, José Antonio Bonilla Uribe, dar una explicación técnica del tema en términos jurídicos.
“Debemos entender que un homicidio de una mujer no es un feminicidio”, precisó de entrada el funcionario estatal, quien enseguida desarrollo la explicación jurídica de la diferencia entre el homicidio doloso de una mujer y un feminicidio, además de dar a conocer que del 2012 al 2016 “tenemos 46 feminicidios”.
Bonilla Uribe señaló que “no hay una alerta” y señaló que en la Fiscalía han “considerado que la alerta de género no sea la medicina correcta para el problema de homicidios de mujeres en el estado; creo que los grupos de mujeres puedan estar pidiendo una medicina equivocada que no resuelve el problema”.
Bonilla Uribe dijo que cada organismo deberá de hacer las acciones correspondientes para “atacar este problema” y dijo que la Fiscalía ya lo estaba haciendo a través de la creación de una Unidad de Género que investigará temas de violencia intrafamiliar, de Homicidios contra mujeres, de delitos cobra mujeres, “con independencia de la Fiscalía Especial de Delitos Sexuales y Violencia Familiar”.
Añadió que “son acciones concretas que si las realizamos podemos atacar la violencia contra la mujer, de igual forma la Fiscalía ha elaborado el protocolo Alba”, que es similar a la alerta Ámber en caso de la desaparición de alguna mujer.
Dijo que esas son acciones concretas que “nos van a ayudar a reducir los índices de violencia contra la mujer”.
Más adelante, el vice fiscal informó que de 2012 a principios de 2016 ha habido 870 mujeres asesinadas, lo que ocasionó que los reporteros
le preguntaran que ante ese alto índice de asesinatos de mujeres no podía considerarse una contradicción que sólo 46 casos hayan sido tipificados como feminicidios.
Entonces intervino el fiscal Olea Peláez, quien dijo que como autoridades se han abocado “al cumplimiento de la ley, resulta verdaderamente inviable que lo hagamos así, el Código Penal nos específica en siete fracciones cuáles son los elementos para que exista un feminicidio, no podemos ir más allá de lo que la ley nos prevé, no podemos consignar un feminicidio cuando es homicidio”.
Señaló que “desafortunadamente en otras administraciones, cuando mataban a una mujer consignaban al sujeto por feminicidio y el juez re clasificaba el delito por homicidio; estamos aplicando el derecho para que los jueces no nos re clasifiquen, no nos nieguen órdenes de aprehensión y subamos los autos de formal prisión”, finalizó.