* Carlos Garfias, responsable de la Diócesis de Acapulco, demandó que se generen condiciones para el desarrollo integral de los niños guerrerenses
ANA LILIA TORRES
ACAPULCO.— El arzobispo de la Diócesis de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, hizo un llamado a los gobiernos y la sociedad para erradicar las causas que favorecen el trabajo infantil y se garantice la protección de los derechos de los niños en el estado de Guerrero.
Al conmemorarse este 12 de junio el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, recordó que el objetivo este año 2016 eliminar este fenómeno en las “cadenas de producción”, que son el conjunto de actividades o procesos que intervienen en la producción y distribución de un producto.
El prelado católico señaló que actualmente existen alrededor de 168 millones de niños que se encuentran en situaciones de trabajo en el mundo.
Gran parte de este trabajo se encuentra en la economía rural e informal, principalmente en zonas donde los sindicatos y las organizaciones de empleadores son débiles o no existen, o donde los inspectores del trabajo no tienen ningún acceso, resaltó.
“Aunque la mayoría del trabajo infantil tiene lugar en la producción de bienes y servicios para los mercados nacionales, también hay niños trabajando en la producción de bienes y servicios para la exportación”, expuso.
Por ello expresó que este día “es una oportunidad para llamar la atención sobre la importancia de rescatar la sana infancia de los niños y esforzarse por crear sistemas que vigilen sus derechos y favorezcan su educación”.
El clérigo indicó que como Iglesia “creemos que los niños deben crecer en el seno de una familia que favorezca su desarrollo integral, que procure sus necesidades, que les provea educación, diversión, alimentación, y sobre todo cariño y comprensión”.
Es por eso que “hago un llamado a todos para que se erradiquen las situaciones que favorecen el trabajo infantil y se propicie el sano desarrollo de todos los niños”, puntualizó Garfias Merlos.