* El gobernador del estado Héctor Astudillo se reunió con una comisión de elementos estatales que por la mañana pararon labores en el cuartel de Chilpancingo y acuerda, incrementarles el monto del seguro de vida de 750 mil a un millón de pesos, y mejorarles otras prestaciones laborales

 

 FERNANDO HERNÁNDEZ / SALVADOR BELLO

 

Más de 500 elementos de la Policía Estatal realizaron ayer por la mañana un paro de labores durante hora y media en demanda de mejores condiciones de trabajo y prestaciones laborales.

Durante el relevo de turno, a las 7:00 de la mañana, tras el pase de lista, los policía pararon labores en las instalaciones del cuartel general de Chilpancingo exigieron a sus superiores y al gobierno del estado, que les incrementen sus viáticos, bono de riesgo, seguro de vida y mejoras en sus instalaciones y equipo de trabajo.

El gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores, quien se encontraba en Acapulco encabezando algunas actividades oficiales, fue informado de la situación y se trasladó a Chilpancingo para dialogar con una comisión de los policías inconformes, lo que sucedió en un encuentro poco después del mediodía al que no tuvo acceso la prensa.

Al finalizar el diálogo con la comisión policial, el mandatario estatal informó que los policías estatales le plantearon entre 14 y 16 puntos de su pliego petitorio, entre ellos incremento del seguro de vida, guardería para los hijos de policías, aumento de viáticos, mejores uniformes y equipo de protección personal como cascos y chalecos antibalas.

Durante la reunión, el gobernador Astudillo se comprometió a incrementar el monto de las pólizas de los seguros de vida para los policías, de 750 mil pesos a un millón de pesos, y a pregunta expresa reveló que no todos los policías cuentan con el seguro de vida, pues la anterior administración gubernamental no pagó las pólizas correspondientes.

“Tuvimos nosotros que pagar los deducibles”, dijo.

Informó que ya había girado instrucciones al secretario de Finanzas “para que se revise cuánto nos va a costar incrementar el monto del seguro de vida”, abundó.

En lo referente a la demanda de viáticos que los policías reclaman, “también vamos a ver cuánto nos cuesta incrementar los viáticos, que no es otra cosa que lo que usan para comer”, informó.

El gobernador manifestó que los viáticos de los policías estatales ascienden a 6 mil pesos mensuales, es decir 3 mil pesos quincenales, y la demanda es que se incrementen a 9 mil pesos mensuales.

“Obviamente tenemos que revisar cuánto nos cuesta”, explicó.

Recordó que como parte de los compromisos con la comisión policial negociadora se acordó que “vamos a hacer una guardería para los hijos de los policías, buscaremos el terreno lo más rápido posible”.

Sobre la exigencia de la destitución del general Pedro Almazán Cervantes, como secretario de Seguridad Pública, expuso que hay cuestiones que impiden satisfacer totalmente todas las peticiones y dejó entrever que dentro de la SSP hay quizá un problema de comunicación entre los mandos y los elementos operativos.

Por eso, dijo, resultó oportuno el diálogo.

Detalló que le comunicó al secretario de Seguridad Pública que no se trataba de “mermar su mando” al dialogar directamente con los policías inconformes, sino de resolver con oportunidad los problemas de la corporación.

En el encuentro, el gobernador Astudillo les reiteró a los policías que no es su enemigo, sino su aliado, y que reconoce el trabajo que desempeñan en beneficio de la sociedad guerrerense en una tarea fundamental como lo es la seguridad pública.

Astudillo aseguró que la policía estatal es una institución a la que se debe atender y sobre todo dignificar, por lo que les expresó la total disposición de su gobierno para tener un cuerpo policiaco en mejores condiciones.

 

El paro de actividades y las demandas

 

“El motivo de estar reunidos aquí en este cuartel es que los compañero tenemos muchas inconformidades. Reconocemos que tenemos obligaciones, que tenemos deberes, pero también tenemos nuestros derechos”, señaló uno de los policías — que rehusó dar su nombre—, al comenzar el paro de labores.

Minutos más tarde, fueron atendidos por el subsecretario de Operación Policial de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Enrique Rivera Mendoza, quien se comprometió a que en tres días les darían una respuesta a sus peticiones.

Ante la presencia de su superior, el subsecretario Rivera, los policías cambiaron su discurso y mencionaron que su acción no era un paro de labores, sino que se trataba de una reunión para manifestar sus peticiones a sus superiores y pedirles que los atendieran.

Entre las demandas que mencionaron a los medios de comunicación, figuran: que se reactive la caja de previsión social, el incremento de viáticos a 4 mil 500 pesos. También pidieron que se les pague los días 31, ya que se les paga por quincena y cada día 31 lo laboran “de a gratis”.

Además, que se les pague un bono de riesgo, pues revelaron que no les dan los 80 meses de salario que estipula la ley por muerte natural y que menos les dan los 160 meses de salario por muerte en servicio, pero aumentó la petición a que les den 100 meses por muerte natural y 200 en servicio.

Pidieron que por día trabajado les den un día descanso, que los uniformes que les proporcionan sean de buena calidad y que se les den uniformes al menos dos veces al año “como mínimo”.

También solicitaron que el personal que se enferme y tenga que ser hospitalizado en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) cobre sus viáticos de manera integral.

Por su parte, las mujeres policías solicitaron que se les respete el derecho a lactancia, que les proporcionen el servicio de guardería y que les den incapacidad por maternidad, además de que les den viáticos.

Los policías protestantes también exhibieron sus instalaciones y patrullas en mal estado así como los uniformes desgastados, por lo que pidieron mejoras en equipo de trabajo y del cuartel, y que se les dé un trato digno.