* “No se necesita ser analista o mercadólogo” para constatar que es real el problema, dijo el dirigente de la Cámara Nacional de Comercio, Raúl Iracheta Montoya
ANA LILIA TORRES
ACAPULCO.— La Cámara Nacional de Comercio de Acapulco (Canaco) pidió a los tres órdenes de gobierno no minimizar el impacto que ha tenido la violencia en la actividad económica de este municipio, y los invitó a hacer recorridos por las principales avenidas de la ciudad para que constaten que es real el cierre de negocios.
El secretario general de la Canaco, Raúl Iracheta Montoya manifestó que “no se necesita ser analista o mercadólogo” para darse cuenta que son realmente graves los efectos de la situación de inseguridad en la economía de Acapulco y en cualquier avenida del puerto se pueden ver locales cerrados.
Señaló que los empresarios “no estamos peleados con el gobierno” ni buscan dimensionar más el problema de la inseguridad, pero tampoco pueden callar la realidad que están enfrentando todos los días, a causa de este fenómeno.
Luego de que dieron a conocer que 480 empresarios están enfrentando juicios de embargos y han cerrado 300 negocios este año, autoridades municipales, entre ellos el director de Reglamentos y Espectáculos, Germán Farías y miembros de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales del Estado de Guerrero (Concamingro) consideraron exagerada la cifra de establecimientos que han bajado cortinas y pidieron a los comerciantes no caer en “amarillismo”.
“El problema del cierre de negocios no sólo lo hemos señalado en la Canaco, también están los comerciantes del mercado de El Parazal que han denunciado que el 50 por ciento de locales está cerrado y los hoteleros del Acapulco Tradicional, es decir que los afectados somos nosotros los que vivimos más directamente del turismo”, expresó el dirigente camaral.
Iracheta Montoya invitó a autoridades y empresarios que dudan de que la violencia está provocando el cierre de negocios a “caminar por las calles, a hacer recorridos y preguntar a la gente cómo les está yendo” en cuestión de ventas por la situación de violencia que se vive en Acapulco.
Expuso que el organismo que representa agrupa a los negocios dedicados al comercio, servicios y turismo, que son los más perjudicados por la situación económica, mientras que la Concamingro está integrada por industriales que se dedican a ramas que quizás no están resintiendo tan gravemente la crisis.
“Nosotros tenemos que exponer nuestra postura y la realidad que se vive en el comercio, servicios y turismo, donde todo mundo está viviendo una situación precaria, por lo que pedimos a las autoridades que no minimice el problema y lo vean en su justa dimensión”, señaló Iracheta Montoya.
El dirigente de comerciantes pidió que las autoridades realicen las acciones necesarias para garantizar la seguridad en el municipio y favorecer las condiciones para que el turismo venga en las próximas temporadas de vacaciones, porque es lo que le corresponde hacer, sin poner en duda la situación que están denunciando los empresarios que viven directamente el problema.