Por El Suplente
El tlapaneco Vidulfo Rosales, defensor de los padres de Ayotzinapa, los llamó “pinches indios piojosos”.
De tener cerrojo
salvarse podría,
así no tendría
el molesto piojo.
Por El Suplente
El tlapaneco Vidulfo Rosales, defensor de los padres de Ayotzinapa, los llamó “pinches indios piojosos”.
De tener cerrojo
salvarse podría,
así no tendría
el molesto piojo.