*El dirigente de esa organización empresarial reiteró que decenas de empresarios han cerrado sus negocios y abandonado la capital del estado
Gilberto Guzmán
Los empresarios de Chilpancingo lo único que quieren es sobrevivir ante problemas como la inseguridad que ha provocado no solo el cierre de unos 50 negocios sino la salida de esas familias de la ciudad, así como la solicitud de profesionistas con empleos formales de cambiarse de adscripción con tal de irse a otras ciudades, afirmó el dirigente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Chilpancingo, Adrián Alarcón Ríos.
En entrevista, el dirigente de esa organización empresarial dijo que es lamentable lo que ocurre en la capital del estado, porque se ha disparado el comercio informal debido a que personas que antes estaban registradas ante la Secretaría de Hacienda con sus trámites en regla, se han ido a la informalidad.
“Guerrero es el primer lugar a nivel nacional en donde la informalidad subió a más del 80 por ciento, lo cual quiere decir que de cada 10 personas económicamente activas en Guerrero 8 están en la informalidad, algunos tienen empleos de manera temporal e informal, pero la otra parte es la que no está trabajando, hay mucho desempleo ya en Chilpancingo”, explicó.
Otro problema, dijo Alarcón Ríos, es que “en Guerrero notamos que la inversión privada es muy poca, solamente la que se anunciaba hace unos meses era la construcción de un hotel de cadena internacional, el Holiday Inn, y que no ha terminado de iniciar, y por otro lado prácticamente los empresarios en Chilpancingo lo único que queremos ahorita a nivel general es sobrevivir”.
Afirmó que muchos negocios han tenido que cerrar por la situación de inseguridad en el municipio, y que durante los primeros tres meses del 2016 alrededor de 50 empresarios no solo han bajado sus cortinas sino que se han ido de la ciudad, “son familias que se han ido muy lastimadas vía la extorsión, el secuestro o el asalto no solo a sus negocios sino a su casa habitación, algo que nos tiene muy preocupados”.
Alarcón Ríos alertó que hay integrantes de la Coparmex y otros empresarios que en diversas reuniones le informan que quieren irse de Chilpancingo, pero no lo hacen por no dejar sus raíces y costumbres y les es difícil iniciar negocios en otras latitudes.
“Por eso seguimos insistiendo a las diferentes autoridades, sobre todo la municipal, que nos atienda, que nos escuche, hemos alzado la voz muy fuerte a veces, luego se lastiman ellos, se sienten ofendidos porque hablamos fuerte pero no encontramos otra solución”, explicó.
El dirigente indicó que va a la alza el número de comerciantes y empresarios de Chilpancingo “que estamos sobreviviendo no solamente al flagelo de la inseguridad sino a lo que trae como consecuencia, que es la cuestión económica, porque además de los 50 comercios que han cerrado, hay personas que aunque no tengan su negocio han pedido su cambio de adscripción en los empleos formales donde lo pueden hacer, y se quieren ir de Guerrero”.