* Señalan que analizan hacer tal petición ante la nula respuesta de autoridades de los tres niveles de gobierno y están dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias para que se las devuelvan

 

Bernardo Torres

 

Como una medida desesperada y en el afán de recuperar sus viviendas que fueron invadidas en el fraccionamiento El Mirador, damnificados de la colonia El Amate, aseguraron que analizan solicitar la ayuda de la misma delincuencia organizada, toda vez que varios de los invasores se asumen como “sicarios”.

Y es que han acudido ante todas las instancias para solicitar que se desaloje a los invasores, pero ni la Sedatu, el gobierno del estado o el federal, están actuando con interés para resolver el conflicto.

Indicaron que ayer que subieron al fraccionamiento fueron amenazados por este grupo de personas que dijeron ser “sicarios”, quienes les señalaron que “así como desaparecieron a los 43, podían desaparecerlos” a ellos.

Por tal motivo, dijeron que en los próximos días, como ocurrió en el municipio de Arcelia donde la población pidió ayuda a un líder del narco, para rescatar a 21 personas que estaban secuestradas y obtuvieron respuesta más rápida que por parte de las autoridades, ellos harán lo mismo.

“Por parte de las personas damnificadas hacemos un llamado a las autoridades acerca de las casas de El Mirador, ya que los que están invadiendo son gente del gobierno, maestros de la CETEG y otros que dicen tener acuerdos con autoridades federales y municipales”.

Pidieron a las autoridades municipales y estatales, que revisen quienes de sus trabajadores están detrás de esta invasión, porque no es justo que gente que no resultó damnificada haya dejado sin hogar a los verdaderos afectados por las tormentas.

“Le pedimos al presidente Enrique Peña Nieto de la manera más atenta, él que tiene el poder, que nos solucione ya que no tenemos respuesta”, lamentaron.

Adelantaron que no permitirán que estas personas se salgan con la suya e irán hasta las últimas consecuencias, pues son de bajos recursos que están pagando renta o están de “arrimados” con sus familias, mientras otros que no tienen necesidad llegaron con la mesa puesta.

“Tenemos muchas pruebas que somos los dueños y propietarios de esas viviendas en las cuales ellos se fueron a meter a la mala y no tienen ningún papel donde consta que son los propietarios, así que hacemos un llamado a las autoridades para que te tomen cartas en el asunto y se aplique el desalojo lo más pronto posible”, señaló la señora Gabriela Aguilar. (API)