* Aseguran que la nueva supervisora despidió de manera injustificada a una de sus compañeras por haber protestado
Bernardo Torres
Trabajadores de limpieza de la clínica del ISSSTE en Chilpancingo, pararon labores ayer, por segunda ocasión en este mes, luego de que la nueva supervisora despidió, dicen, de manera injustificada a una de sus compañeras como medida de represión por haber protestado.
Miriam Rangel, quien durante la primera protesta tomó la voz y el liderazgo de los trabajadores para denunciar una serie de irregularidades y para denunciar abusos y malos tratos por los representantes de la empresa “Tapimex”, fue la primera despedida y amagan con despedir al resto de los inconformes, señalaron.
Esta mañana, un grupo de alrededor de 10 personas se plantaron en la entrada principal del hospital para exigir la reincorporación de su compañera y respeto a los trabajadores, así como cese al hostigamiento por parte de la supervisora, Patricia Rocha Villegas.
Expusieron que desde hace varios días, a amenazado con despedir a todos los que se han manifestado, aun cuando existen compromisos que a pesar del cambio de empresas, deben respetar a la base trabajadora.
El pasado 8 de este mismo mes, denunciaron estar recibiendo presiones por parte de sus jefes; Guillermo Nieto y Carlos Pérez, quienes pretenden despedirlas si no aceptaban sumarse al sindicato que ellos representaban.
Miriam Rangel, una de las 15 trabajadoras de limpieza con las que cuenta el hospital del ISSSTE, manifestó que pertenecían a la empresa “Opción Integral de Negocios”, la cual se fue de manera inesperada y sin que les avisaran; esta última no les pagó su liquidación por 3 y 5 años de servicio.
Manifestó que llegó posteriormente “Tapimex” con Carlos Pérez al frente, quien de inmediato les dijo que tenían un tiempo determinado para pasarse al sindicato, a manera de mandato, algo que no les pareció, puesto que indicaron que ellos están muy bien en el Sindicato de Trabajadores de Comercio y Prestadores de Servicio en Zonas Locales y Federales de la República Mexicana.
“Después de todo esto, Guillermo Nieto y Carlos Pérez ofrecen hasta 500 mil pesos para que nuestro sindicato nos dé baja y nos puedan correr sin pagarnos nuestra liquidación”, dijo Rangel.
Indicaron que los directivos de “Tapimex” los habían amenazado con mandar a la policía para que se los llevaran presos bajo el argumento de que no tenían por qué manifestarse.
Enfatizaron que lo único que piden es que si van a seguir en la empresa laborando entonces que se les respete el hecho de que les paguen su quincena y que no los obliguen a pasarse al sindicato que quiere “Tapimex”.
Comentaron que si la empresa ya no requiere de sus servicios, entonces buscarían que se les pagara su antigüedad y otros adeudos. (API)