Fernando Hernández

 

El secretario de la Contraloría estatal, Mario Ramos del Carmen, dejó ver que las auditorías al sector central de la administración estatal no tienen prácticamente avances o han arrojado resultados para conocer a detalle la situación financiera que enfrenta la administración estatal.

El funcionario allegado al ex alcalde de Acapulco, y ex candidato a gobernador, Luis Walton Aburto, evidenció que los procesos de auditoría tampoco han arrojado observaciones o solicitudes de solventación de información.

La designación de Ramos del Carmen se entiende como parte de las negociaciones que habrían sostenido el PRI y MC al calor de las pasadas elecciones. En su momento puntualizó que las revisiones que se continúan haciendo a las arcas del gobierno del estado y al estado en que fueron entregadas por los gobiernos anteriores no han derivado en denuncias ante instancias como la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Procuraduría General de la República (PGR).

Entonces a pregunta expresa mencionó que hasta ahora ninguna auditoría ha concluido, “tenemos varias abiertas que quedaron en proceso de las anteriores, pero no tengo ahorita el dato pero son varias”.

“Estamos en la etapa de las auditorías de investigación, el hecho de que se haga una auditoría no quiere decir que deba de llevar una sanción, o salir mal todo, es un trabajo que se hace lento. Las auditorías se siguen según el tamaño de cada dependencia o la importancia del monto”, anotó.

Indicó que incluso en la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), dependencia que concentra un déficit financiero de alrededor 2 mil 500 millones de peos, y adeudos por más de 9 mil millones de pesos, ni siquiera se han iniciado los procesos de auditoría.

El funcionario evidenció que la única auditoría que en la que se está trabajando es en la Administradora de Playas de Zihuatanejo, y esto fue debido a una instrucción expresa que le hizo el gobernador, Héctor Astudillo en una reunión de gabinete del 4 de enero.